Los chapulines aprovechados de siempre

Recordemos algo: la figura de los “indepen- dientes” existe desde hace muchos –mu- chos– años en México. Es más, los “inde- pendientes” aparecieron en la vida nacional antes que los partidos políticos surgieran en nuestro país gracias a la intromisión de un embajador de los Estados Unidos.

Corría el año de 1824 cuando Guadalupe Victoria y Nicolás Bravo (entre otros ocho o nueve “independientes”) contendieron para la presidencia de México. ¿El resultado? Victoria ganó y Bravo quedó como vicepre- sidente. Luego Nicolás quiso arrebatarle la presidencia a Guadalupe y terminó fuera del país por tal osadía.

Así que los “independientes” no son el agua fresca en el desierto ni la luz al final del túnel para nuestro país. Y menos aún cuando la lista de los “independientes” a diferentes puestos de elección popular son todo menos “independientes”. Son todo menos congruentes. Son, eso sí, los mismos chapulines aprovechados de siempre.

Ahí están los casos de los suspirantes “independientes” a la presidencia de México. Por citar un par de casos: una suspirante renuncia al PAN solo porque ya no le dieron juego político (no es la única ruptura en nuestro país, recordemos cómo surgió el PRD o Morena). El otro botón de muestra es un suspirante que tan solo tiene dos años en la gubernatura de Nuevo León y un sábado –casual– aprovechó para registrar su intención de participar en las elecciones presidenciales de 2018.

Ejemplo igual de grave es el del diputado “independiente” del estado de Jalisco que ahora quiere convertirse en senador “inde- pendiente” pero que le importa tres pesos la profesionalización de los cargos de elección popular. ¿O será que ya sabe todo lo que tie- ne que conocerse para ejercer las labores de un diputado? Claro está que ya visualizamos cuál será el siguiente brinco del “chapulín independiente”. Salto que también intentará aún sin concluir su labor –en caso de que llegue– a la senaduría de México. Deseo que los electores no compren los sofismas de los chapulines aprovechados de siempre.