Por Carlos Meraz
Su estilo musical es pulsante, similar al “beat” del corazón, el primer sonido y el último que escucha el ser humano en su existencia, y por ello el trío mexicano Aceros del Pacífico decidió titular a su primer disco simplemente “Pulso”.
El álbum que salió este verano es conceptual e incluye el sencillo “Medication”, así como el cóver al tema setentero “Tiny Dancer”, de Elton John, como “bonus track”.
Su sonido podía definirse como synth-pop-rock, con cierta nostalgia ochentera, con música introspectiva y a la vez bailable.
LA EPIFANÍA DEL NOMBRE
El nombre del grupo —compuesto por Erich Novoa, Jans Sarmiento y JC Alonso— surgió de una revelación durante un viaje por Los Cabos, donde mientras escuchaba maquetas para el proyecto musical, Novoa, vio una construcción, una fábrica abandonada en el desierto llamada Aceros del Pacífico. Y ahí hace un año empezó todo.
“Somos productores, músicos y diseñadores de sonido, con un pulsante sonido minimalista que en nuestros shows recrea una atmósfera, con un pop digerible, sonidos acústicos, un ambiente colmado de beats y bajos ochenteros. Es toda una experiencia multisensorial”, afirmó Novoa.
Aceros del Pacífico debutó en el Festival Vaivén 2018 y se ha presentado en importantes escenarios de la CDMX, como Departamento, Bar Oriente, Caradura, Pasagüero, el Foro Indie Rocks! y el primer Selina International Music Summit.
Mañana actuarán en el festival Deserto By Lista 2019, en la Estación Central de Querétaro, y el próximo 28 de septiembre ofrecerán un concierto gratuito en la CDMX, en Bajo Circuito Multiforo Urbano, en la Condesa.
