CIUDAD DE MÉXICO.- América y Cruz Azul chocarán en el estadio Azteca, en el primer episodio de una final que promete tener un par de agarrones entre los mejores equipos de la temporada.
Pese a que será su cuarto duelo por el título, en esta ocasión hay ingredientes que tienen a los aficionados con la mira puesta en la final soñada, que por lo pronto ha superado las expectativas del clásico regio que hace un año definió al monarca del futbol mexicano.
Y es que los 21 años de los celestes sin salir campeones, aunado a la maldición del superlíder, junto al deseo de revancha, han provocado que La Máquina llegue con una obsesión por conquistar el Apertura 2018, como nunca se había presentado.
“Sabemos que el pasado 7 de diciembre se cumplieron 21 años que la institución no consigue un título de liga, entonces nos comprometimos porque teníamos el reto más importante del futbol mexicano, eso nunca fue presión”, afirmó Pedro Caixinha, técnico cementero, en el día de medios previo al juego de ida.
Con las Águilas la perspectiva es distinta, Miguel Herrera tiene la exigencia del campeonato porque es el objetivo que le pide la directiva a todos sus técnicos, ya sólo han pasado cuatro años desde su último título.
En las conquistas anteriores del América estuvo involucrado Ricardo Peláez, quien hoy es el presidente deportivo del Cruz Azul, situación que parece molestarle al ‘Piojo’, ya que ha insistido en que los directivos no ganan campeonatos.
"Creo que Ricardo aprendió mucho de lo que hice yo en su estadía conmigo, todas esas cosas se las enseñamos a Ricardo y que bueno que ahora se las comparte a Pedro y con toda la gente de Cruz Azul, y se firmen compromisos de que todo lo que se ha hecho, Ricardo lo sigue implementando”, aseguró Miguel Herrera en conferencia de prensa en el estadio Azteca.
El duelo está cantado, directivos y cuerpo técnico tienen una parte de responsabilidad, pero los estelares son los jugadores, que tienen el reto de ofrecer 180 minutos de calidad, para no defraudar a sus fieles aficiones.
JLR
