EFE
Madrid.- Atravesar por fin la fase de grupos es la ambición principal de la selección de Túnez que por segunda vez consecutiva y por sexta en su histórico general, forma parte del cartel de un Campeonato del Mundo con su presencia en Qatar 2022.
No es alentador el bagaje de las Águilas de Cartago en este evento. Siempre se ha estancado en el primer tramo y cuenta con solo dos victorias de los quince partidos que en las cinco presencias previas ha jugado. Tampoco los antecedentes recientes en los torneos de su confederación.
No atravesó los cuartos de final en la Copa de África de Naciones de Camerún 2021 y eso le costó el puesto a Mondher Kebaier como seleccionador. En el cargo desde que en el 2019 sustituyó al francés Alain Giresse fue relevado a finales de enero por Jalel Kadri.
Fue una designación de urgencia, de carácter provisional la de Kadri como responsable del combinado tunecino. Sin embargo, la clasificación para Qatar sosegó a las autoridades deportivas del país que le dejaron en el banquillo. Y es que no fue sencillo el recorrido por los tramos hacia la fase final de Qatar de Túnez que asentó su condición de favorito en la segunda ronda del camino con el primer lugar de su grupo, por delante de Guinea Ecuatorial, Zambia y Mauritania.
Su primer puesto le condujo a la tercera fase, la definitiva, donde tuvo que superar una dura eliminatoria contra Mali. Un autogol de Moussa Sissako proporcionó el triunfo de las Águilas de Cartago en Bamako, en el choque de ida. Una renta que hizo valer en Radés, cuatro días más tarde, para amarrar su billete hacia el Mundial y asentar a Kadri como seleccionador. Misión cumplida.
Cuenta ahora el equipo tunecino con un plantel que aúna talentosos futbolistas con experiencia en el futbol europeo con otros que sobresalen en su liga nacional. Es el delantero del Montpellier francés Wahbi Kharzri la principal referencia de las Águilas de Cartago. Afronta el atacante de los 'verdes' su segunda participación en un Mundial. En Rusia 2018 marcó dos de los cinco tantos de su selección. Se mantiene a buen nivel y es el puntal ofensivo del grupo de Kadri.
El alma, no obstante, es el capitán, Youssef Msakni que ha desarrollado gran parte de su carrera en Catar, aunque disfrutó de su experiencia europea con dos temporadas en el Eupen belga. Ellyes Skhiri forma parte de la plantilla del Colonia, en la Bundesliga. Otros como Mohamed Drager, del Lucerna suizo; Montassar Talbi, del Lorient francés; Aissa Laidouni del Ferencvaros húngaro; Ali Abdi del Caen francés, Anis Ben Sliemene del Brondby danés e, incluso, el joven centrocampista Hannibal Mejbri, del Manchester United.
Junto a ellos está asentado el portero Bechir Ben Said aunque en los últimos compromisos del equipo nacional ha ocupado el marco Aymen Dahmen, Nader Ghandri, Youssef Msakni, del Al Arabi o Seifeddine Jaziri, que juega en Egipto.
Túnez aspira a aumentar sus estadísticas mundialistas y ampliar su relación de triunfos en este gran evento. Hasta ahora solo cuenta con dos partidos ganados. En su debut, en Argentina 1978, cuando ganó a México por 3-1 y en la última, en Rusia 2018 cuando se impuso a Panamá.
Las expectativas no son grandes en Túnez que confía en el factor sorpresa. La calidad de su nueva hornada se ha sumado al carácter habitual del conjunto, implicado en la causa y que pretende recuperar el talante con el que afrontó su participación en Argentina 1978, cuando se convirtió en el primer equipo africano en ganar un partido en un Mundial.
A la victoria contra México siguió una derrota con Polonia y un meritorio empate con Alemania. Terminó tercero del grupo, fuera de las eliminatorias, pero acabó noveno en la clasificación general del Mundial. Ello le supuso un histórico recibimiento a la llegada al país.
Tardó dos décadas en regresar de nuevo a un Campeonato del Mundo. No lo logró ni para España 1982, ni México 1986, ni Italia 1990, ni Estados Unidos 1994. Consiguió el pasaporte para Francia 1998 donde acabó cuarto del grupo G con un empate ante Rumanía como mejor resultado. Perdió ante Inglaterra y frente a Colombia.
Aún así, fue la mejor etapa en el fútbol internacional para la selección de Túnez que logró otras dos presencias mundialistas. En Corea y Japón 2002 y también en Alemania 2006. Una igualada contra Bélgica fue su botín en la edición asiática. Igual sucedió cuatro años después. El choque contra Arabia Saudí fue el único que no perdió. Terminó equilibrado a dos tantos.
Ya no se clasificó para una fase final de un Mundial hasta doce años más tarde, en Rusia 2018. Se perdió Sudáfrica 2010 y Brasil 2014. En Saransk echó el cierre al evento ruso con una victoria, ante Panamá, la segunda de su historia. Fakhreddine Ben Youssef y Wahbi Khazri hicieron los tantos del conjunto africano que también dio una buena imagen ante Inglaterra y contra Bélgica, que alcanzaron, ambas, las semifinales.
