Autoridades rusas descubrieron que una pareja de caníbales arrestada en 2010, por el asesinato de 30 personas, vendían pasteles hechos de carne humana a diversos comercios sin que nadie lo supieran.
La pareja identificada como Natalia y Dmitry Baksheeva practicaban el canibalismo durante unos 20 años y se encargaban de abastecer una academia militar y a otros comercios con los restos de sus víctimas.
De acuerdo con el periódico Moskovsky Komsomolets, la mujer de 42 años y su esposo vendían en diversas ocasiones pasteles para sostenerse económicamente, hasta que las autoridades los arrestaron tras descubrir unas fotografías de cuerpos desmembrados.
El dueño de un negocio, Vitaly Yakubenko, comentó que la mujer lo visitó en ese año para ofrecerle un suministro de carne a su cafetería, el cual no acepto, porque trabajaba con proveedores certificados.
La Policía mencionó que la pareja incluso pudo engañar a muchas de sus víctimas por medio de una aplicación de citas, para que llegaran a su domicilio con facilidad. Entre una de las víctimas se encuentra una joven de nombre Elena Vashrushev, de 35 años de edad, quien era mesera de un restaurante cercano al domicilio de la pareja.
Dentro del apartamento de los acusados, se encontraron frascos con restos humanos en vinagre, 19 trozos de piel, y en la cocina hallaron varios recipientes con carne al vapor, indicó el medio local.
