Cabañas cumple siete años del balazo en la cabeza

El paraguayo se quedó sin dinero y vive ahora con sus padres

La mañana del 25 de enero del 2010, los aficionados del América despertaron con una terrible noticia, pues su goleador, el delantero paraguayo Salvador Cabañas, había recibido un balazo en la cabeza en un centro nocturno de la Ciudad de México.

El guaraní permaneció en estado de coma unos días y los médicos determinaron no retirarle la bala para no poner en riesgo su vida. Aunque Cabañas logró sobrevivir a esa tragedia, a partir de ese día, su vida no fue la misma.

El seleccionado paraguayo se perdió el Mundial de ese año en Sudáfrica y no volvió a jugar un partido oficial con las Águilas del América. Aunque tuvo una recuperación casi “milagrosa” no pudo jugar futbol profesional a un alto nivel.

Por si eso fuera poco, el goleador histórico de los Jaguares de Chiapas, se separó de su esposa y perdió por completo todo su dinero (aproximadamente 9 millones de dólares).

“El doctor había dicho que era imposible que yo sobreviviera. Me quedé dormido un rato y subí al cielo. (Dios) me tocó en la frente, donde me dispararon y me dijo ´Hijo, te falta mucho todavía para que vengas acá, así que anda, a disfrutar la vida y ayuda a los más necesitados”

Actualmente, Chava vive en el modesto barrio Sagrada Familia, en Itaugua, Paraguay, con su hijo y sus padres, a los que apoya con una panadería. Además, dirige las inferiores del Deportivo Capiatá.