Pasaron más de dos meses para que Saúl “Canelo” Álvarez y Julio César Chávez Jr, este día volvieran a verse para realizar la última rueda de prensa con miras a la pelea del 6 de mayo.
En el Teatro KA del MGM Grand Hotel ambos pugilistas volvieron a encontrarse, donde se declararon listos para ofrecer una batalla que será histórica.
“El peso es un riesgo que estoy corriendo”
El hecho de tener que modificar su peso para pelear contra Julio César Chávez es un riesgo que el Canelo Álvarez decidió correr con la finalidad de chocar en el encordado con el Hijo de la Leyenda.
Este hecho lo coloca en relativa desventaja, pero explicó que hasta el momento no ha tenido problemas en el proceso para bajar a los 74 kilogramos.
“Es algo diferente para mí, es un riesgo que estoy tomando, pero me siento muy fuerte, en los entrenamientos a los sparrings los sentí muy bien, pero ya veremos en la pelea; estoy listo para esto”, comentó el tapatío.
Insistió que no aceptará el cinturón huichol por sus conflictos con el Consejo Mundial de Boxeo, por lo que propuso una subasta.
“Pondré todo para que esta pelea quede en la historia del boxeo. Estamos listos. Si quieren pueden subastar el cinturón en caso de que gane, por mí no hay problema”, comentó.
En tanto, Oscar de la Hoya, promotor del Canelo, explicó la importancia de la reyerta. “El ganador de esta batalla será declarado el mejor peleador de México en el mundo”, consideró.
Ansioso y un poco nervioso se mostró Julio César Chávez en la última reunión ante la prensa previo al combate contra el Canelo el próximo sábado. El Hijo de la Leyenda se presentó con un pants blanco, lentes de sol y un gorro colorido. La aparente inseguridad se despejó cuando tomó la palabra.
No soy más el hijo, soy el nuevo Julio César Chávez”
Chávez Jr. consideró que esta pelea es un parteaguas en su carrera y ve una oportunidad para deshacerse del apodo de Junior.
“No soy más el hijo de Julio César Chávez. Soy el nuevo Julio César Chávez”, dijo durante la presentación. Asímismo aprovechó para atacar al Canelo, quien le ha recordado su positivo por marihuana en 2012, a lo que Chávez contestó al rememorar un escándalo de Álvarez, acusado en 2011 por golpear a un civil, lo que puso en riesgo su licencia para pelear de forma profesional.
“Escuché que Canelo dijo que yo no represento a México por lo de la marihuana de 2012, pero yo al menos no he golpeado a nadie fuera del ring”, comentó.
También intervino Julio César Chávez padre, quien calificó la pelea del sábado a la altura de las que él tuvo como profesional para después rematar muy a su estilo:
“Esta pelea es igual o más grande que las mías y creo que va a paralizar a todo México... vamos a dejarnos de mamaditas y vamos a ver el sábado de qué cuero salen más correas”, manifestó.
La pelea se llevara a cabo este 6 de mayo en el en la T-Mobile Arena.
