Carlos Hermosillo resalta el trabajo de Caixinha y Peláez en La Máquina

Por Ángel Salinas

Ciudad de México.- El Grandote de Cerro Azul confesó “el que cometa menos errores será el ganador”, aunado a ello, culpa a un payaso del calificativo cruzazulear; afirma que no hay maldición en el cuadro de La Noria, acaso mala planeación; “no hay favorito”, asegura Carlos Hermosillo.

Cruz Azul genera futbol, hay confianza en Carlos Hermosillo, quien desempolva los recuerdos. “Con la llegada de Ricardo Peláez al club y la contratación de Pedro Caixinha como director técnico, el equipo se transformó en seis meses”.

La Máquina Celeste del Invierno del 97, afirma el “Grandote de Cerro Azul”, se formó tras varias temporadas, “El de Caixinha cambió la cara a un equipo” que no terminaba de cuajar.

“Hay confianza en un equipo que tiene una buena defensa y genera juego” para enfrentar al América.

Carlos Hermosillo resalta el trabajo

Ríe ante la supuesta maldición que aqueja al conjunto celeste. “Algunos se dedican a sacar lo más malo que se pueda… tienen que vender y tener rating”.

Y culpa a un payaso, “que no importa ahora quién fue” del calificativo: cruzazulear. “Hay quienes no tienen la fortuna ni de jugar una liguilla, olvídate de estar en una final”.

En el Invierno del 97, el delantero fue el anotador del gol que dio el título a Cruz Azul ante el León y desde esa fecha inicio la maldición celeste… ataja, “eso no sé de dónde salió, lo hacen para vender”.

Para Hermosillo, el club no concretó en las finales a las que logró acceder a la final, así que no hay maldición, “acaso una mala planeación”.

De cara a los enfrentamientos en el Estadio Azteca, estima que serán dos partidos intensos.

“El América tiene jugadores peligrosos. Hay que estar atentos. La contundencia que presentaron los jugadores ante Pumas no se va a volver a repetir. Ese día la metieron. Es un plantel que deja jugar y eso le viene bien a Cruz Azul”.

¿Y la Máquina Celeste?

“Está perfectamente armada de atrás hacia adelante… me gusta porque genera y hace goles. Hay que evitar errores, en esta final el que cometa menos errores será el ganador”.

Sobre el escenario, descarta que el Coloso de Santa Úrsula vaya a favorecer al América. “He escuchado mucho eso de que es casa de las Águilas, claro, es su casa porque son los dueños, pero eso no representa nada en la cancha, ahí son once contra once”.

Sobre el peso de las bancas, considera que en una final todo juega: “Las bancas, el cuerpo técnico, el parado táctico”.