Tras el hostigamiento de grupos delincuenciales contra sus trabajadores, la compañía Coca-Cola Femsa decidió cerrar sus operaciones en Ciudad Altamirano en el estado de Guerrero, ya que acusaron que hay falta de un Estado de Derecho en la zona.
“Con el objetivo fundamental de preservar la integridad y la seguridad de sus colaboradores, Coca-Cola Femsa decidió cerrar sus operaciones de forma indefinida, a partir del viernes 23 de marzo en Ciudad Altamirano, Guerrero. La medida fue tomada anteponiendo la seguridad de más de 160 colaboradores que laboran en el Centro de Distribución”, detalló la empresa por medio de un comunicado de prensa.
La empresa indicó que “la falta de condiciones necesarias para operar de manera eficiente y segura en esta zona del estado de Guerrero, así como la reciente agresión injustificada hacia uno de nuestros colaboradores, llevó a la empresa a tomar esta decisión”.
Coca-Cola FEMSA anuncia el cierre indefinido de sus operaciones en Ciudad Altamirano, Guerrero. https://t.co/H8YShsv2cD
— FEMSA (@FEMSA) 23 de marzo de 2018
La decisión de la empresa se dio porque han recibido constantes amenazas de grupos delincuenciales, así como afectaciones a las instalaciones de las empresas y en los últimos días lo trabajadores han resultado heridos.
“Coca-Cola Femsa reitera su compromiso de trabajo en estricto apego a la cultura de la legalidad que le caracteriza”, indicó.
ATAQUES
El pasado 21 de marzo la empresa decidió abrir de nuevo la planta, luego de que cerrara dos meses por las extorsiones y la quema de uno de sus automóviles; sin embargo, al reanudar labores un grupo atacó a balazos el lugar, dejando como resultado un trabajador lesionado.
De acuerdo con las autoridades, los hechos se dieron minutos después de las 11 de la mañana, por lo que elementos de la Gendarmería arribaron al lugar donde encontraron al colaborador herido de bala en el pecho.
De acuerdo con los testigos, los sujetos armados dispararon desde la calle a los empleados que surtían de producto a sus clientes; luego de los hechos los hombres huyeron sin que la autoridad interviniera.
Este ataque es el tercero, pues el primero se dio por amenazas por parte de grupos criminales, el segundo fue por la quema de uno de sus carros de distribución y el tercero fue la balacera.
OTROS CIERRES
No es la primera vez que Femsa se ve obligada a cerrar una planta por la inseguridad que se vive en el país, el primero fue en el municipio de Arcelia en la zona de Tierra Caliente.
En el caso de Iguala, el cierre de operaciones de la planta fue en los primeros meses del 2014 por estrategia comercial y de distribución, según informaron los voceros de la empresa.
