Discos de la década: Música para escucharla por siempre

Por Fernanda Delgado

Profundamente marcada por la pérdida de grandes artistas y el nacimiento de otras tantas estrellas, la década que está terminando estuvo colmada de música y grandes propuestas en todos los géneros. A continuación, te presentamos un recuento por algunos de los álbumes más representativos del periodo 2010 a 2019.

Blackstar, David Bowie. 8 de enero de 2016. 
Esta gloriosa elegía de la estrella británica llega como una culminación digna para un artista de su envergadura, de sí mismo y para sí mismo; con un concepto se desplaza, de alguna manera, como el recuento de su fructífera carrera. En cuanto al sonido, explora el jazz, el pop y el rock, e incluye acompañamientos corales, logrando una fusión única, pero que preserva el vigoroso estilo del Starman. Ni hablar del concepto visual, es simplemente alucinante.  

Plastic Beach, Gorrillaz. 26 de enero de 2010. 
Este trabajo discográfico es la tercera producción de estudio de la agrupación virtual, que regresó con un álbum conceptual doble, en el que hace gala de un sonido renovado, lleno de rock, arreglos orquestales, toques funk, R&B y soul. La singular travesía por la playa plástica corre de la mano de Gorrillaz e invitados como Snoop Dog o Lou Reed, en la música; así como la participación de Bruce Willis en el video de su sencillo STYLO. Simplemente imperdible. 

My Beautiful Dark Twisted Fantasy, Kanye West. 22 de noviembre de 2010. 
En el inicio de la década este disco fue el parteaguas dentro de su género, y condicionó en gran medida el trabajo de sus contemporáneos. Las letras, provenientes de las turbulencias en la vida del mismo West, están fuertemente cargadas de crítica, de una realidad cruda y descarnada, presentada como una épica sinfonía, igualmente barroca y urbana, llena de góspel. Sin duda, el material más notable hasta ahora del rapero y esposo de la mediática Kim Kardashian. 

21, Adele. 24 de enero 2011. 
El segundo álbum de estudio de la cantante es aún un ícono de la década que termina. Con un marcado trasfondo de soul que se mezcla perfectamente con el pop, la excepcional voz de Adele puso en el mapa una vez más el pop inglés y recorrió el planeta con una de las canciones más representativas de la época: Rolling in the deep. Es un disco impetuoso y lleno de pasión que ha sabido tolerar el paso del tiempo.  

Random Access Memories, Daft Punk. 21 de mayo de 2013. 
El regreso de la dupla francesa se manejó por todo lo alto con este material. Plagado de colaboraciones, el sonido característico adquirió una nueva dimensión, ya que lograron mimetizar sonidos pop, rock, funk, y los estilos contrastantes de diversos artistas, creando temas clásicos casi inclasificables y totalmente atemporales. El disco más grande del dueto, hasta ahora (lo cual es mucho decir). 

AM, Arctic Monkeys. 6 de septiembre de 2013. 
El sonido duro y poderoso que la banda plasmó en este disco es con el que pasó a la posteridad. La presencia de toques soul y arreglos sonoros que no le restan protagonismo al rock, hizo un recorrido por varios estilos, armoniosamente amalgamados en el álbum. El presente material logró revolucionar completamente la escena musical del Reino Unido, dejando un legado palpable en esta, incluso perceptible en el pop actual. 

Lemonade, Beyoncé. 23 de abril de 2016.  
Este material lleno de polémica es también el álbum más consolidado de la intérprete, quien navegó impetuosamente por el R&B, rap, pop, electro, hip hop, e incluso integró arreglos de rock, llevando a buen puerto cada una de las canciones. Con letras que manejan dobles sentidos o gritan sus ideas, el disco es un sinónimo de empoderamiento femenino y un ícono contemporáneo de la cultura afroamericana. 

You Want It Darker, Leonard Cohen. 21 de octubre de 2016. 
El disco fue el último trabajo del icónico cantautor canadiense. Producto de una difícil etapa en su vida, ya con 82 años y una inminente bancarrota, este álbum tiene sabor agridulce. La voz cavernosamente profunda de Leonard Cohen recita sus canciones, mezclándose con letras llenas de poesía, melodías oscuras y coros, que inducen a la inminente idea de una despedida.   

When We Fall Asleep, Where Do We Go?, Billie Ellish. 29 de marzo de 2019. 
Siendo la mayor revelación musical del año, la joven cantante estadounidense presenta su álbum debut. Con un sonido minimalista, pero no por eso simple, se permite hacer un recorrido del trap al pop, abordando un concepto completamente disruptivo y novedoso, plagado de simbolismos, aunque al mismo tiempo hace gala de un lenguaje común. Es una oda a su generación y a la cultura del milenio. 

Fear Inoculum, Tool. 30 de agosto de 2019. 
El regreso de la agrupación angelina significó un suceso en la música de este año. El ya marcado estilo de la banda, el metal progresivo, vuelve con virtuosismos luminosos y la maestría que su trayectoria les ha dejado. Los temas, llenos del misticismo que es la marca de la casa, son ejecutados de una manera excelsa, creando una notable travesía sonora de paisajes psicodélicos.