Por Patricia Guillén
En las calles de la Ciudad de México existen alrededor de seis mil monumentos e inmuebles que fueron construidos en entre los siglos XVI al XIX que debido a la arquitectura y memoria histórica de la nación ahora son considerados como patrimonio histórico.
Actualmente, de estos templos, museos, teatros, centros culturales, hoteles y tiendas el 82% son privados y el resto públicos; y son alrededor de 800 permisos anuales que otorga el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) para realizar algún proyecto en un inmueble catalogado.
“Estamos protegiendo el patrimonio histórico de México, pero hay excepciones, que en lugar de solicitar permiso piden perdón porque empiezan a hacer obras a escondidas. Pero los vecinos oyen los martillazos y ellos nos avisan, entonces es cuando nosotros actuamos y suspendemos porque están haciendo cosas sin autorización”, dijo en entrevista a Diario de México, Arturo Balandrano, coordinador de Monumentos Históricos del INAH.
Balandrano explicó que dichos edificios están tutelados o resguardados por el Instituto, y en el país son un total de 117 mil.
“Hay obras que las hacen en escondidas y demuelen una gran parte de la casa. Ahí el INAH cuestiona los planos y permisos. También hay casas que no son inmuebles históricos, pero sí están dentro de un polígono determinado que se debe proteger”, argumentó el investigador.
Recientemente Diario de México dio a conocer las acusaciones de vecinos de Coyoacán, quienes aseveraron que en dicha demarcación se están privatizando los espacios públicos e inmuebles históricos para edificar desarrollos inmobiliarios.
“Tenemos una privatización constante de espacios públicos. La administración del delegado Valentín Maldonado nada más está para sacar dinero y no atiende los verdaderos problemas”, expresó la vecina Rosario Taracena.
Otros colonos acusaron que desde años atrás han reiterado a las administraciones delegacionales la necesidad de atender el arco del Jardín Centenario, algunas calles de las inmediaciones del Centro Histórico e inmuebles catalogados; sin obtener respuesta.
El mes pasado, el Maldonado aseguró que habían iniciado los trámites con autoridades federales y el INAH para que otorguen la liberación de permisos y autorizaciones para que estos espacios sean rehabilitados.
Sin embargo, el coordinador de Monumentos Históricos del INAH, Arturo Balandrano, aseguró que desde hace más de seis meses ha reiterado a la delegación “atiendan, cuiden y restauren “esos lugares.
“El arco de Coyoacán está bastante deteriorado, hemos solicitado a la delegación que lo atiendan, cuiden y restauren, que no amarren cosas, pero nos dijeron que están consiguiendo el dinero y a un restaurador, pero todavía no hay nada”.
Tan sólo en la demarcación existen 200 monumentos. El polígono considerado como patrimonio histórico abarca desde la avenida Universidad, División del Norte, el Conjunto Churubusco hasta Miguel Ángel de Quevedo.
Dentro de esta área se encuentra el predio de San Francisco Figuraco 37, ubicado en la colonia Concepción, aunque el INAH aseguró que no es un inmueble catalogado, este también debe tener autorización.
Según el arquitecto Balandrano, esta construcción fue suspendida debido a que no tenían los permisos correspondientes, tras el llamado de atención los encargados de la obra indicaron al INAH que pretenden llevar a cabo la construcción de seis viviendas, en tanto los habitantes especulan que será un hotel.
“Los señores de este predio de San Francisco Figuraco 37 empezaron a hacer una construcción, nosotros nos dimos cuenta, mandamos una visita de inspección y vimos que estaban demoliendo, pero los suspendimos, una vez suspendidos los trajimos a la mesa y les pedimos nos explicaran qué es lo que estaban haciendo, dijeron que querían demoler y construir seis casas. Les exigimos los documentos y todo, pero ahí es claro que el predio no tiene uso para un hotel, es habitacional”, indicó el especialista.
Diario de México ha insistido con la delegación Coyoacán una posición al respecto; no ha habido respuesta.
