'Hell And Heaven 2020': Cuando el metal juntó al cielo con el infierno

Por María Fernanda Delgado

El Hell And Heaven Metal Fest llevó a cabo su décima edición el pasado fin de semana, en el Foro Pegaso del Estado de México, donde congregó a grandes exponentes nacionales e internacionales del género, así como a 60 mil asistentes en sus dos jornadas del sábado y domingo.

Pese a que la afluencia de público resultó menor a la esperada, tal vez por la crisis sanitaria ante el coronavirus, el ánimo y la sed de metal no desaparecieron en los miles de headbangers que peregrinaron a este oasis musical en busca de una dosis de locura y decibeles, que se vio aderezada con la presencia de agrupaciones como la mítica banda inglesa Deep Purple o la alineación estadounidense Manowar, que debutó en tierras aztecas. 

LOS VIKINGOS MANDAN
La caminata previa al Foro Pegaso permitió escuchar los ecos de las bandas que ya se encontraban en el escenario. El poderosos sonido de la banda nipona Loudness dio la bienvenida a los asistentes y les invitó a aproximarse al escenario principal con canciones como The Sun Will Raise Again y Crazy Doctor.

 

Posteriormente subió al escenario la banda canadiense Deadly Apple, cuyo sonido incorpora toques de sintetizador. Durante la presentación su líder y vocalista, Alex Martell, bajó del escenario para rockear entre los asistentes. 

Más tarde, los brasileños Igor y Max Calavera llegaron para enloquecer a la concurrencia, con temas como Attitude y Ratamahatta, que propiciaron en la multitud la aparición de dos puntos de mosh pit, la violenta danza de los amantes del metal. 

EL PODERÍO EUROPEO 
El power metal alemán se hizo presente con Powerwolf, quienes con un impresionante despliegue visual y la poderosa voz atenorada de Attila Dorn pusieron a cantar a los asistentes con Demons Are A Girl’s Best Friend y Sanctified Whit Dynamite. Les siguió la alineación estadounidense Static-X, quienes a fuerza de nü metal y canciones como Bled For Days y Push It hicieron saltar al público. 

 

 

Pero sin dudas, nadie imaginaba el tremendo show que Amon Amarth, legendaria banda sueca de death metal melódico, entregaría a la concurrencia, que no dejó de alzar, en medio del éxtasis, la mano cornutta. 
Con tres cambios de escenografía, un valet vikingo, un set list de lujo y la inigualable voz de Johan Hegg dejaron a los metalheads con ganas de más. 

 

Posiblemente, debido al magnífico show anterior y problemas con el micrófono principal, la presentación de Phil Anselmo And The Illegals comenzó de manera accidentada y en medio de rechiflas, pero logró remontar con éxitos de Pantera, logrando despertar de nuevo los círculos de mosh pit

 

HUMO EN EL AGUA, FUEGO EN EL CIELO
Con el ánimo encendido, el silencio se rompió por el virtuosismo en el teclado de Jordan Rudess, quien anunció la presencia de Deep Purple en el escenario. La banda se adueñó de este por más de una hora con himnos como Higway Star, Lazy, Space Truckin, Black Night y su más grande éxito Smoke On The Water, que los asistentes corearon al unísono. 

 

 

Por último, la alineación estadounidense Manowar hizo retumbar las bocinas con sus poderosos riffs y terminó de congregar a todos los asistentes frente a su escenario, durante su única presentación en el lugar del Estado de México. 

Su repertorio, incluyó en sus más de 15 temas canciones como Warriors Of The World United y Sons Of Odin, con los cuales cerró con un apoteósica primera jornada del Hell And Heaven

LA HEGEMONÍA DE LA RAPSODIA ITALIANA
Con una notable menor afluencia que el día anterior y una lluvia que aderezó las presentaciones en la noche, el festival continuó a pesar de las múltiples cancelaciones de bandas por el Covid-19, presentando como eventos estelares a la mítica banda italiana Turilli/Lione Rhapsody, quien dejó sentir su poderío, demostrtando por qué es una de las más importantes alineaciones de power metal. También se presentaron la agrupación ucraniana Jinjer y las diosas brasileñas de Nervosa