De acuerdo con el Semáforo Delictivo de la CDMX, en la capital el homicidio incrementó 11% en el 2016, comparado contra el año pasado y 22% respecto a su propia media histórica. En el 2016 se denunciaron 952 homicidios, la cifra más alta en los últimos 5 años, de los cuales 13% fueron ejecuciones de crimen organizado.
El homicidio está altamente concentrado en tres delegaciones: Iztapalapa, Gustavo A. Madero y Cuauhtémoc, seguidas de cerca por Venustiano Carranza, Álvaro Obregón y Miguel Hidalgo. Las primeras tres representan 50% del total de los homicidios cometidos en la Ciudad de México.
Robo a casa se incrementó 13% en el año con un total de 6,284 denuncias, la peor cifra en los últimos 3 años. Se sitúa en rojo a nivel nacional en comparación contra el resto de los estados.
El 60% ocurren en 6 delegaciones: Iztapalapa (15%), Gustavo A. Madero (11%), Benito Juárez (10%), Tlalpan, Cuauhtémoc y Coyoacán con 8% cada una.
En todas las delegaciones de la CDMX hubo un incremento de robo a casa, con excepción de Álvaro Obregón que logró reducir la incidencia en 3%.
Robo a negocio marca un incremento de 7% en el año, con un pésimo segundo semestre. En total se registraron 15,424 denuncias, el peor de los últimos 5 años. La CDMX compara mal en este delito contra el resto del país, se ubica en doble-rojo, ya que es el tercer estado con más robo a negocio con una tasa por cada 100 mil habitantes de casi 3 veces la tasa nacional.
El 65% de los robos se cometen en Cuauhtémoc, Iztapalapa, Benito Juárez, Gustavo A. Madero, Coyoacán y Tlalpan. 
“En resumen, nos preocupan estos 3 de los 8 delitos que monitoreamos. En robo a casa y robo a negocio la CDMX sale muy mal evaluada contra sí misma y contra el resto del país, pero el que más nos preocupa es homicidio, ya que es un delito de alto impacto y está relacionado a crimen organizado“, comentó Santiago Roel, director del Semáforo Delictivo.
“La CDMX ha hecho un gran esfuerzo por mostrarse como una ciudad en paz, pero empieza a deteriorarse el panorama y es tiempo de tomar mejores decisiones tanto a nivel ciudad como a nivel de delegaciones. Sugerimos que se utilice el Semáforo para evaluar mes a mes el comportamiento de la incidencia y con participación ciudadana se obligue a la autoridad a tomar mejores decisiones, para éso es esta herramienta. De nada sirve ocultar o minimizar la realidad.”
