Ante la revelación de que 57 millones de datos de usuarios de Uber fueron hackeados a nivel internacional, el Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI) solicitó un reporte a la filial mexicana de la empresa de taxis por aplicación para esclarecer cuántos socios y clientes connacionales resultaron afectados por dicha filtración.
Asimismo, la dependencia demandó un informe sobre las acciones emprendidas ante dicha situación y probables afectados, además de urgir un plan de riesgos para evitar futuras filtraciones en territorio nacional.
De tal forma, el INAI aseguró que se mantiene en contacto con la Autoridad de Protección de Datos Personales de los Países Bajos, esto con el fin de conseguir “mayor información sobre las acciones que ha emprendido en el caso, pues es importante precisar que la empresa Uber BV está ubica-da en Holanda y de acuerdo con su política de privacidad es la que recaba los datos personales de los usuarios”.
Al respecto, la dependencia aseguró que “a partir de la información que se obtenga de dichas comunicaciones y requerimientos oficiales, el INAI determinará las acciones legales que correspondan, según el marco normativo de su actuación en la materia, a saber, la Ley Federal de Protección de Datos Personales en Posesión de Particulares y su Reglamento”.
Pese a todo, recordó que cualquier empresa que trabaje a través de plataformas digitales con fines comerciales está obligada a contar con ciertas medidas de seguridad, mismas que deben salvaguardar los datos personales, tanto de los prestadores de servicios como de sus clientes.
