Sionismo bíblico

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Por Gerson Gómez


Los cristianos, católicos o evangélicos, defienden la supremacía judía en la antigua Palestina. Dotan al patriarca Abraham de una promesa celestial.

Olvidan, por ceguera de usos y costumbres, la posición del primogénito Ismael. 

Hacen de Isaac un recipiendario de una tierra ya antes habitada.

Nos preocupan las bravuconadas de sus herederos. También entre los judíos existen musulmanes, cristianos, católicos, sodomitas, agnósticos, no binarios, ortodoxos, ultraortodoxos y practicantes de la contemplación universal.

La infamia de agresión de Hamas a Jerusalem es idéntica a los cárteles del crimen organizado contra la ciudadanía mexicana. Pero también a la inversa. En la posición de te pego te elimino. 

Palestina no es un territorio ocupado. Debe estar presente en la mentalidad de la humanidad. Para impedir un genocidio más. El atentado exterminador de conciencias, muy por encima de la razón y el diálogo.

Debemos enderezar la óptica de nuestros sacerdotes, ministros, economistas de la religión y a todos aquellos ausentes de conciencia.

Nuestro gobierno no debe formular pronunciamientos diplomáticos llevados por la rabia de sus embajadores sionistas.

Posibilitar el ingreso de los inconformes a una zona neutra. De respeto por la dignidad de la vida. Apaciguar los ánimos y no colocarse en las puertas mismas del apocalipsis de las imaginaciones.