Ana Torroja y Alaska: Las reinas de Madrid

Foto: OCESA Seitrack

Por Carlos Meraz

La exponente de la nouvelle vague, la escritora y cineasta Françoise Sagan, sentenció: “La admiración es amor congelado”. Y es que las mejores y más duraderas amistades se basan en eso y una prueba es la complicidad, encubierta en una supuesta y publicitada rivalidad por cuatro décadas, que se profesan las dos indiscutibles reinas del pop madrileño: Ana Torroja y Alaska.

Ambas musicalizaron la vida de millones de personas en ambos lados del Atlántico y en España compartieron trono, cetro y corona como las soberanas en la irrupción ochentera de La movida: Torroja, como la voz del grupo Mecano y Olvido Gara, mejor conocida como Alaska, al frente de Los Pegamoides y Dinarama; dos divas de ficticia hostilidad y probada amistad que, por fin, grabaron un tema juntas, en el dueto imposible Hora y cuarto.

“Siempre nos hemos reído de la rivalidad, sea fabricada o de marketing; hacían creer que un fan de una banda pop (Mecano) no podía serlo de otra underground (Alaska), como antes se creyó que eras de The Beatles o The Rolling Stones.

“Entre nosotras hay admiración, química y amistad cada vez que nos encontramos”, advirtió Torroja. 

VOLVER A MÉXICO Y A MECANO

En un ejercicio fílmico tipo Back to the Future, Torroja y Alaska grabaron el video de Hora y cuarto en el bar La Vía Láctea, epicentro ochentero de La movida madrileña en el barrio de Malasaña.

“En el clip se juega con el espacio- tiempo, ya que se repite la historia en diferentes momentos y con diversos personajes. Ella sale con look de David Bowie y yo aparezco como Cher o chica Austin Powers. La locación en La Vía Láctea fue la guinda en la trama”, destacó.

El Tour Volver de Torroja iniciará este 25 de julio en Barcelona y aterrizará en la CDMX, el próximo 26 de noviembre en la Arena Ciudad de México, para luego recorrer el país. 

“En México haré tour y me sumaré también al elenco musical del 90’s Pop Tour. En una de esas y se anima Alaska a tocar en la tierra donde nació, pues ya me queda claro que no hay imposibles.

“La puerta siempre está abierta para una reunión de Mecano, no es imposible pero sí complicado. Hubo intentos de hacer una película y no se concretó; hacer una serie sobre los tres integrantes sería lindo, pero también igual de complicado”, precisó.

Como bien aconsejó el poeta francés Arthur Rimbaud: “Hay que ser absolutamente moderno” y Hora y cuarto, lo es tanto como la insólita dupla que lo interpreta.