Mi Sobrino Memo, afiliado al club de los corazones rotos

Por Carlos Meraz

El premio Nobel de Literatura de 1957, el francés Albert Camus, sentenció: “No ser amado es una simple desventura. La verdadera desgracia es no saber amar”. Algo que ha experimentado, el joven cantautor Mi Sobrino Memo, alguien para quien el dolor es parte ineludible de su vida y obra, que no rechaza sino incorpora en una suerte de afiliación como miembro destacado del club de los corazones rotos.

A sus 27 años, Eduardo Martínez, verdadero nombre de Mi Sobrino Memo, es un millennial que bien podría encajar con gusto en la llamada Generación de Cristal, un término que se le atribuye a los hijos de la Generación X por su fragilidad y quedar rotos por dentro cuando las cosas no salen como lo esperaban. 

Incluso de eso trata su canción Nunca sabrás, quinto sencillo de su próximo álbum Bye, bye, sayonara; nunca sabrás que esto es para ti, un tema de despedida al ser amado, cuyo final sentencia: Y recuerda, el amor de tu vida también tienen derecho a encontrar al amor de su vida.

PARE DE SUFRIR

Nunca sabrás es la segunda parte de una historia que se divide en cuatro episodios, siendo el primero Los felices, lanzada el pasado 22 de enero.

“Vienen la parte tres con Viernes 13 y la cuatro con Casa playa, está última es mi tema favorito del disco, que saldrá en CD y vinyl en septiembre.

“Mi estilo es pop folk y más que depresivo es melancólico, pero siempre con un toque de humor y visualmente mis videos son vintage”, explicó.

 Mi Sobrino Memo ya planea hacer un streaming conceptual, que incluirá la estética recurrente en sus clips: fantasmas y bolsas de papel estraza, que simbolizan el pasado y la timidez, respectivamente.