La 'cacería de brujas' de China contra las criptomonedas

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Por Moris Beracha

Cada vez son más los países que están adoptando el uso de las criptomonedas, entre ellos Cuba. Sin embargo, China nada a contracorriente: ha emprendido lo que se puede considerar como una ´cacería de brujas´. El viernes 24 de septiembre, el Banco Central del gigante asiático anunció que todas las transacciones financieras con divisas digitales son ilegales, lo que representa una nueva medida regulatoria contra este tipo de comercio.

Para ´justificar´ la decisión, la institución bancaria expuso en un comunicado que “las actividades comerciales vinculadas con monedas virtuales ponen en grave peligro la propiedad de los ciudadanos”. Además, advirtió que quienes no respeten la reglamentación serán “investigados por responsabilidad penal de acuerdo con la ley”.

Según el Banco Central, en los últimos años el comercio y la “especulación” con el Bitcoin y otras monedas virtuales han alterado el orden económico y financiero de China. “Desde el inicio de las criptomonedas, aumentó el lavado de dinero, la recaudación ilegal de fondos, los esquemas piramidales y otras actividades criminales e ilegales”, sostienen las autoridades económicas de ese país.

Ahora, esto no es nuevo. China lleva tiempo tratando de erradicar las criptomonedas con la implementación desde 2014 de diferentes medidas. En 2019 prohibió oficialmente el comercio e incluso en tiempo reciente llegó al punto de obligar a los bancos a bloquear las transacciones con criptos -en mayo las autoridades financieras advirtieron a los compradores que podían perder su dinero- y a las empresas de electricidad a perseguir a los mineros. 

Tan esa sí que Pekín también prohibió el comercio de computadoras de gran capacidad para ser usadas en la minería y las consecuencias han sido evidentes. Mientras que en septiembre de 2019 el 75% del uso de energía para minar bitcoins en el mundo se concentraba en China, para abril de 2021 había caído a 46%.

Pese a todas esas restricciones, el mercado siguió operando en línea a través de transacciones en el extranjero. Solo que esta vez el reglamento hecho público por el Banco Central es la medida más dura, clara y completa que implementa China para cerrar el comercio y la minería de criptomonedas en todas sus formas. 

El impacto fue inmediato. Por ejemplo, el Bitcoin retrocedió 6,3% el viernes cuando se anunció que todas las operaciones con monedas digitales son ilegales en China. En horas de la tarde de ese día su valor se había desplomado hasta los 42.041 dólares.

A partir de la prohibición varias empresas comenzaron a emigrar del país. Los exchanges Binance, Huobi y FTX, así como el pool de minería Sparkpool, son algunas de las compañías que anunciaron el cese de toda actividad en China. Algunas informaron que eliminarían gradualmente las cuentas de los usuarios de la nación asiática. 

Pero hay más, después de declarar ilegales las transacciones con criptomonedas, China dio un nuevo paso para limitar esta actividad aún más. Desde el 28 de septiembre en el país no se puede ingresar a portales relacionados con Bitcoin y otros criptoactivos, ya que estos están bloqueados por un firewall que impide el acceso. Se trata de los sites CoinGecko, Trading View y CoinMarketCap, que son referentes del mercado de las criptomonedas.

Todo apunta a que la intención de China es monopolizar el mercado con el ‘eYuan’, una criptomoneda controlada por el Banco Central que permita a las autoridades conocer todas las transacciones de todos sus ciudadanos minuto a minuto, según una investigación realizada por el portal español El Economista.es. 

No obstante, más allá de lo que está ocurriendo en China, los volúmenes de negociación de las criptomonedas a nivel mundial se han mantenido estables. Ciertamente, cuando ocurren eventos como este el mercado reacciona de manera negativa, pero cada vez el efecto es menor y dura menos tiempo. Esto es prueba de que la demanda por el Bitcoin y las criptomonedas se fortalece día tras día.