Mala Vibra: Atrapado en la lírica

Por Carlos Meraz

Paradójico resulta que te apellides Moreno y seas tan blanco como la leche, que ostentes el nombre de Diego Armando y tengas la gracia de un hipopótamo con polio en el futbol o el colmo de los colmos, extraído de la fascinante realidad, llamarte Sam Sung y trabajar en Apple. Tal sería el caso de Mala Vibra, el DJ y músico ecuatoriano cuyo mote, por su actitud positiva ante la vida, debiera ser Buena Vibra.

Ahora enrolado en el género del trap, subgénero del rap, el cantante lanzó su nuevo sencillo Cojamos como conejos, un tema de título escandaloso pero letra acorde a una era cuasi apocalíptica, de individualismo a ultranza y sin tiempo para el amor.

Con 10 años de carrera, Mala Vibra ha desfilado por el rock punk, la electrónica ancestral como denominó a su estilo que incorpora sonidos andinos, techno, house y chill out hasta decantarse por el trap.

“El trap me ofrece un beat nuevo y, sobre todo, el uso de la lírica en mayor escala, pues en la música electrónica las letras son lo que menos importa y yo quería contar historias”, destacó el músico de 27 años.

DEJA LISTO SU MEJOR TEMA

Detrás de las omnipresentes gafas del productor cuencano Edwin Méndez, conocido en la palestra de la música electrónica como Mala Vibra, hay algo mucho más que un look que esconde un deterioro ocular que ha postergado la realización de su cuarto álbum.

Durante su estancia en México, el también disc jockey será sometido a una intervención quirúrgica en ambos ojos por un problema, suscitado hace una década, que hoy le pasa factura y está al borde de perder la vista.

Consciente de que en el quirófano se juega la visión y hasta la vida, ya que le ha generado un daño en la cabeza, Mala Vibra compuso Lo que siempre quisimos hacer, un emotivo tema que bien podría ser una despedida o una bienvenida a la vida, con una letra cuyo inicio y final son una declaración de principios.

“Se lanzará después, pase lo que pase... Su letra empieza con; Últimamente todos hemos sentido la muerte de cerca... y termina con: Mientras tanto no tengo nada que perder, haré lo que siempre he querido hacer”.

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