Por Nohemí Pineda Lira
Cuautitlán Izcalli.- Al llegar al evento de cierre de campaña en la explanada municipal, se le cuestionó al candidato Daniel Serrano sobre si hacía falta el presidente municipal con licencia Ricardo Núñez, y dijo que en Morena hace falta todo mundo, “porque en este movimiento nadie sobra”.
En la explanada, antes de la entrevista con Diario de México, ya esperaban al abanderado de la coalición Juntos Haremos Historia miles de personas, que antes bailaron y cantaron con grupos folclóricos y de música versátil, incluida la candidata a diputada federal Xóchitl Zagal; lugar en donde las lonas resultaron insuficientes para cubrir del sol a cientos más que se resguardaban en la Concha Acústica y los árboles, desde donde aplaudían y vitoreaban a Daniel Serrano.
Arriba en el templete, líderes sociales, de comerciantes, del PT y Nueva Alianza, integrantes de la planilla y la titular del DIF con licencia Micaela Alvarado, se unieron al proyecto de los candidatos Daniel Serrano y Armando Bautista; este último, luego de asegurar que el morenista Serrano Palacios va a ser presidente de Cuautitlán Izcalli, les guste o no les guste, pidió auditoría a la tarjeta rosa, al Issemym y a los que saquearon el sistema de salud “porque no se las vamos a perdonar”.
“La gente está harta de las simulaciones, ya no queremos falsas promesas de la derecha, ni camisetas rojas acosando y denigrando a los comerciantes, ni empresarios que se visten de santos para corromper en el municipio y por supuesto ya no queremos más fiascos en nuestro municipio”, señaló Daniel Serrano.
El candidato de la coalición Juntos Haremos historia, reconoció que las diferencias no son con los trabajadores de la administración municipal, ni simpatizantes o militantes de la derecha, porque ellos mismos han sido traicionados por sus partidos, “vamos a gobernar para todos ustedes sin distinción de partidos”.
Basta un poco de lógica, dijo, para saber que tenemos que invertir en seguridad, agua y entornos sustentables, así como respeto al futuro de las próximas generaciones, porque ser de Morena significa buscar el bienestar colectivo por encima del interés individual, y “me comprometo a hacer de Izcalli un hogar de inversiones y confianza, en donde la riqueza se distribuya de forma justa y la ciudadanía tenga empleos dignos y respetables, que sea una ciudad de progreso, cultura y bienestar”.
