Diario de México, comprometido con la verdad y crítica del acontecer nacional

Por Israel M. Campos Montes

Ciudad de México.- Hoy estamos de manteles largos, este día cumplimos 72 años de ser un periódico con información oportuna y veraz, que siempre detalla de manera precisa cada párrafo de la noticia, a la par de que nuestros datos siempre son ecuánimes. Por ello damos las gracias a nuestros lectores que nos han permitido crecer a su lado todos los días y en cada coyuntura económica, de espectáculos, deportiva y política. 

Sin duda, desde el año pasado, recién habíamos celebrado un aniversario más, la situación por la pandemia de la Covid-19 vino a modificar todo el ambiente en nuestra redacción y es que debido a la Jornada Nacional de Sana Distancia que empezó el 23 de marzo, nuestra labor periodística migró a una etapa poco conocida y experimentada en México, realizar la edición impresa y cobertura noticiosa desde casa.

El reto ha sido grande, las tareas laborales se modificaron y más allá de que se piense que el estar en el hogar impide concentrarse y dar el 100 por ciento, la realidad es que el grupo liderado por nuestro presidente Federico Bracamontes Baz, el director editorial, redactores, coeditores web, diseñadores gráficos y personal de sistemas, siguió con la misma entrega e ímpetu de cubrir cabalmente esta coyuntura, la cual hasta la fecha aún no termina y sigue dándonos oportunidad para seguir en el gusto de nuestra audiencia, esto al ofrecer comunicación asertiva y una imagen amigable tanto en el rotativo físico como digital.

Los preceptos de nuestro fundador Federico Bracamontes Gálvez se mantienen intactos, porque tal y como lo planeó en ese momento que eran los cimientos de la incipiente historia de Diario de México, la lucha por la libertad de expresión persiste en cada rincón de nuestras instalaciones y cuyo sello característico es siempre ofrecer el mejor producto comunicativo libre de banderas partidistas y doctrinas políticas.

CALIDEZ Y SENCILLEZ

Bracamontes Gálvez siempre fue un hombre cordial y respetuoso, principios que todavía imperan y que son la clave del éxito para prevalecer como un medio de información confiable, seguro e inspiracional para nuestros columnistas y colaboradores.

Debido a la sencillez que existe, es un lugar abierto a los jóvenes y a sus inquietudes, lo que permite que haya una redacción libre, lo cual no obstaculiza los sueños de cada pluma que por aquí ha transitado durante estos 72 años maravillosos.  

Además, Diario de México es un semillero de nuevas generaciones, con visiones actualizadas sobre cómo realizar periodismo, tanto de la forma clásica, como de la contemporánea, la cual no solo versa en la información a pie juntillas, sino que cuestiona y explica esos menesteres que la mayoría de actores infieren en sus declaraciones o discursos.  

“Una cosa es la visión correcta y otra cosa es la visión verdadera, una cuestión que hace temblar el espíritu al cuestionarlo sobre lo que entiende por esencia”, sostiene Jesús Martín Barbero, teórico de la comunicación y los medios.

Bajo este precepto es que desarrollamos nuestra línea editorial, diferenciado las vicisitudes que hay en cada sexenio, porque es sabido que este país siempre es modificado, ya sea en leyes o en acciones de gobierno por los dirigentes en turno, quienes en una especie por dejar su sello y enarbolar su culto a la personalidad trastocan avances e impiden la continuidad que tanto urge para lograr el desarrollo en todos los ámbitos de nuestra sociedad.

“Las masas humanas más peligrosas son aquellas en cuyas venas ha sido inyectado el veneno del miedo… del miedo al cambio”, señalaba el poeta mexicano y premio Nobel de literatura en 1990, Octavio Paz.

IMCM