Gobernador de Michoacán asegura que agresión a sacerdote fue por un ‘accidente de tránsito’
Ciudad de México.- El gobernador de Michoacán, Alfredo Ramírez Bedolla, aseguró que la agresión que sufrió el sacerdote Mateo Calvillo en el municipio de Querendaro fue consecuencia de un “incidente de tránsito” y no porque el crimen organizado estuviera “esperando” o “persiguiendo” al sacerdote.
Ramírez Bedolla recordó que el sacerdote acusó en una carta que, mientras viajaba en su vehículo, unos hombres le bloquearon el paso y que uno de ellos lo golpeó en la cara de manera brutal con un arma.
Por lo que el mandatario le reiteró al párroco que presente una denuncia, a fin de aclarar el caso, aunque la Fiscalía General del Estado (FGE) ya inició una carpeta de investigación por este hecho.
“Nos damos cuentas que otros indicios señalan que hubo un incidente de tránsito, él iba manejando su vehículo y atropelló a, no sé si sea correcto, dicen por ahí a las vacas, pero no era una vaca, era un perro. Esta persona, al parecer se acercó a reclamar del perrito que atropellaron, no sabemos más allá de que la persona lo golpeó, le dio un golpe en la nariz”, dijo.
Pese a lamentar la agresión, Ramírez Bedolla afirmó que el padre “no tiene fractura de nariz” y el golpe al párroco fue con el puño y no con un arma.
“No sabemos más allá de que la persona lo golpeó al padre, le dio un golpe en la nariz, si tenemos información de que es un golpe con puño, no es un golpe con arma (…) también confirmamos que no tiene fractura de nariz, todo parece que fue un golpe con la mano, puño cerrado derivado de este incidente de tránsito”, enfatizó.
Y aseguró que “sería muy oportuno que presente la denuncia, para saber qué ocurrió, porque esto se hizo un tema mediático nacional”, y comparó el acontecimiento con lo ocurrido con los dos sacerdotes jesuitas en Chihuahua.
El gobernador sostuvo que el sacerdote “no corre ningún riesgo”, aunque dijo que, si solicita el mecanismo de protección, “haremos la evaluación y se la daremos, pero no es necesario”.
