Las ansias de desarrollo retrasan el compromiso climático de India hasta 2070

Foto: EFE

Nueva Delhi, 2 nov (EFE).- La seguridad energética y la fuerte dependencia del carbón ha empujado a la India a retrasar dos décadas, hasta 2070, el compromiso de alcanzar el nivel de cero emisiones netas de carbono que pide la ONU, una demora que el tercer país con más emisiones y cuyas ciudades respiran uno de los aires más enrarecidos del mundo justifica por su necesidad de desarrollo.

El primer ministro indio, Narendra Modi, aprovechó el lunes su discurso en el escaparate mundial de la cumbre del clima COP26 en Glasgow (Reino Unido) para anunciar por primera vez el plazo marcado por la India para alcanzar la neutralidad de carbono: "El año 2070".

Según la petición de la ONU, las emisiones globales deben reducirse a la mitad para 2030 y llegar al nivel cero neto para 2050, un objetivo al que se han comprometido muchos de los países más industrializados, mientras que otros como China fijaron para 2030 el pico de emisiones y en 2060, la neutralidad.

Modi relegó ese dato inédito al final de una lista de cinco objetivos que se impuso este país de mil 300 millones de habitantes para combatir el cambio climático, entre los que estaban también alcanzar para 2030 los 500 gigavatios (GW) de energía no fósil (en 2019 eran 134 GW frente a 228 GW de carbón y gas) y cubrir el 50 % de sus necesidades energéticas con renovables.

Además, para 2030, la India se comprometió también a reducir la intensidad de carbono de su economía a menos del 45 %, así como a rebajar sus emisiones de carbono en mil millones de toneladas.

LA INDIA: 17 % DE LA POBLACIÓN MUNDIAL Y 5 % DE EMISIONES

Todos estos objetivos se producen, advirtió Modi, a pesar de que la India es "un país en desarrollo (...) que está trabajando para sacar a millones de personas de la pobreza, (y que aunque cuenta con) el 17 por ciento de la población mundial, su responsabilidad en las emisiones ha sido solo del 5 por ciento" global.

Unos datos similares a los que expone la base de datos de emisiones de la Comisión Europea, que sitúa el porcentaje de China, el mayor contaminante del mundo, en el 30.34 %, el de Estados Unidos en un 13.43 %, y el de la India, en un tercer lugar, en un 6.83 %.

Además, las toneladas de emisiones per cápita se sitúan en 1.9 en la India, frente a las 15.5 de Estados Unidos o las 8.1 de China.

Por eso, el mandatario remarcó que los países ricos deben responder a su anuncio con un mayor impulso a las ayudas financieras: "La India espera que los países desarrollados hagan que esté disponible un billón de dólares (860 mil millones de euros) en forma de financiación climática tan pronto como sea posible".

Esa petición supera incluso el compromiso no cumplido tomado en el Acuerdo de París en 2015 de financiar con 100 mil millones de dólares anuales a las naciones en desarrollo para limitar el calentamiento global por debajo de los 2 grados, con la esperanza de restringirlo a 1.5 grados por encima de los niveles preindustriales.

"Para nosotros, el éxito de la COP dependerá de lo que se entregue en financiación", afirmó antes de la cumbre a un grupo de periodistas de medios extranjeros, entre los que se encontraba Efe, el secretario del Ministerio de Medioambiente indio, R.P. Gupta.

INNOVACIÓN TECNOLÓGICA

Esa financiación resulta clave para que la India, que en la actualidad "depende demasiado del carbón", según Gupta, pueda invertir en una tecnología que permita al país reducir las emisiones al tiempo que garantiza la seguridad energética y el crecimiento.

El mandatario indio insistió este martes en un acto paralelo durante la COP26, bajo el lema "Acelerar la innovación y el despliegue de tecnologías limpias", que con esos avances se podrá extraer de fuentes como el sol la energía necesaria, teniendo en cuenta que "la misma energía que consume la raza humana en un año, la proporciona el sol a la Tierra en una hora".

El Centro para la Ciencia y el Medioambiente de la India (CSE) celebró por su parte hoy en un comunicado los objetivos anunciados por Modi en la COP26 como "audaces y ambiciosos, pero su consecución también será un gran desafío", anotó.

"Teniendo en cuenta nuestra contribución comparativamente baja a las emisiones globales, junto con el hecho de que nuestra economía necesita crecer y satisfacer las necesidades energéticas de millones de ciudadanos pobres, no necesitábamos hacer una promesa tan ambiciosa (pero) el tiempo de la procrastinación y la evasión ha terminado", aseguró la directora general del CSE, Sunita Narain. EFE

mt/ess