El 6.1% del PIB de Latinoamérica se lo 'engulle' la evasión fiscal

Por Danilo Díazgranados

Parece una historia de ciencia ficción, pero la Comisión Económica para América Latina y El Caribe acaba de sacar a la luz pública una no muy transparente cifra.

En esta oportunidad, el organismo multilateral señaló que recursos que representan aproximadamente 6.1% del Producto Interno Bruto de la región no llegan jamás a las arcas de los gobiernos, ya que este dinero se va por el caño de la evasión y la elusión fiscal.

El director de la División de Desarrollo Económico de la Cepal, Daniel Titelman, destacó que las autoridades tienen la obligación de diseñar estrategias tendentes a disminuir la ocurrencia de este tipo de ilícitos, así como a combatir los flujos financieros no legales. De esta manera se “dará capacidad a los países de tener una política fiscal que responda a sus necesidades en el marco de una recuperación económica luego del impacto del COVID-19”.

Tales declaraciones se dieron en el marco del encuentro “Alto Nivel sobre Responsabilidad, Transparencia e Integridad Financiera Internacional para Lograr la Agenda 2030”.

La Cepal señaló que se hace necesario disminuir la conmoción que representan los altos índices de evasión y elusión fiscal en Latinoamérica, en razón de que los gobiernos requieren de una mayor cantidad de recursos monetarios que les faciliten hacer frente a la pandemia.  Por ello urge mitigar la evasión para ayudar en la recuperación de los países.

El funcionario resaltó que en un mundo post COVID es preciso la adopción de políticas fiscales, pues en el escenario actual los modelos de desarrollo no solo dependen de la producción de bienes de bajo valor agregado. Se requieren aportes de otro tipo que permitan reducir las desigualdades, además de ser sostenibles ambientalmente.

En el transcurso de la misma actividad, Mireya Valverde Okón, directora general de Asuntos Normativos de la Unidad de Inteligencia Financiera de la Secretaría de Hacienda de México, resaltó la importancia de la cooperación internacional y de la necesidad de que los países de la región trabajen en equipo para juntos hacer frente a esos delitos que, de alguna manera, limitan el desarrollo. “Es crucial para la rendición de cuentas y la transparencia”, acotó.

“Se hace imprescindible el compartir información y normas de implementación que permitan una cooperación efectiva y eficiente, así como la prevención en la lucha de delitos como el lavado de dinero”, puntualizó Valverde.

Luchar contra la evasión fiscal y trabajar en conjunto para disminuir la ocurrencia de delitos de esta naturaleza, que atentan contra las arcas de los gobiernos y, por ende, de los beneficios de los ciudadanos, deberían ser tareas fundamentales de todos los gobiernos de Latinoamérica, tomando en consideración que los recursos que entran en el erario público se traducen en bienestar para la población.