Santos golea a Boca Juniors y avanza a final de la Copa Libertadores

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SAO PAULO.- Con una contundente goleada, Santos sometió 3-0 a Boca Juniors para avanzar a la final de la Copa Libertadores, donde enfrentará a Palmeiras en el Estadio Maracaná.

Los clubes brasileños le ganaron la partida a sus rivales argentinos para buscar la ‘gloria eterna’ del torneo continental, el próximo 30 de enero.

Las emociones comenzaron desde el primer minuto con un disparo de Marinho a la entrada del área, que se fue apenas por encima del travesaño de la portería de Esteban Andrada.

El gol de la quiniela fue marcado por Diego Pituca, quien aprovechó un rebote a un disparo de Yeferson Soteldo, en una jugada que el volante brasileño inició con un par de dominadas, para habilitar al delantero venezolano.

Boca tocó la puerta hasta después de la media hora de juego, con una pelota que condujo Carlos Tevez y fue derribado en los linderos del área, desde donde se encontró el esférico Sebastián Villa, quien buscaba el ángulo, pero su tiro se fue ligeramente desviado.

Antes de ir al descanso, Andrada sacó un par de fogonazos de los locales, provenientes de los botines de Marinho y de Kaio Jorge.

Con un golazo de vestidor de Soteldo, Santos aumentó la ventaja y comenzó a soñar con la final, en la que ya lo esperaba Palmeiras, para un derbi paulista en el Maracaná.

Marinho llegó a línea de fondo tras una pared con Kaio Jorge, para lanzar una diagonal retrasada que Lucas Braga definió con categoría de crack para darle forma a la goleada.

El conjunto xeneixe quiso reaccionar con un disparo de larga distancia de Carlitos Tevez, que se fue por un lado del arco defendido por Joao Paulo.

Santos comenzó a tocarle la pelota a Boca, lo que calentó a Frank Fabra, quien le dio un pisotón a Marinho, para ganarse la tarjeta roja y sentenciar la derrota de los argentinos.

Salvio, Tevez y Villa jugaron al tiro al blanco, pero estrellaron una serie de intentos en la zaga local y en Joao Paulo, para ahogar el grito de gol.

El Peixe bajó de intensidad, lo que aprovechó Boca para generar llegadas de peligro, que fueron contenidas por el guardameta paulista.


JLR