San Juan Cancuc, el pueblo indígena que rechaza vacunarse por miedo

EFE

Por Mitzi Mayauel Fuentes Gómez 

San Juan Cancuc.- Un pueblo indígena, de nombre San Juan Cancuc, se ha convertido en uno de los primeros en desmarcarse del plan de inmunización federal contra la Covid. "Aquí la gente no quiere vacunarse porque puede traer efectos negativos. Ni los adultos mayores quieren", asegura Sebastián Santis, uno de sus habitantes.

Ubicado en las montañas de la zona Altos de Chiapas, el municipio está mayoritariamente poblado por mayas tzeltales y cuenta con una población de alrededor de 40 mil personas distribuidas en unos 45 poblados.

En esta región, según datos oficiales de las autoridades de salud, solamente se han registrado tres casos de la Covid desde el comienzo de la pandemia hace casi un año.

Una cifra que contrasta con los más de 8 mil contagios y casi 700 muertos en ese estado, uno de los más pobres del país.

Por su parte, el alcalde del municipio, José López López, informó que el pasado 28 de enero se realizó una asamblea con agentes auxiliares municipales de las 45 comunidades, con la presencia de autoridades sanitarias y otros regidores del ayuntamiento con tal de hablar del plan de vacunación a adultos mayores.

Aunque las autoridades aseguraron haber dado la información pertinente, fue quizás la falta de casos en el municipio, aunado al desconocimiento o a las costumbres ancestrales, la que llevó al pueblo, a rechazar vacunarse, según confirmó el presidente municipal.

De esta manera, por el sistema de usos y costumbres con los que se rigen algunos pueblos indígenas, el ayuntamiento llegó al acuerdo de que en San Juan Cancuc no se llevará a cabo la campaña de inmunización y no permitirán que se instale un módulo de vacunación.

ENTRE EL MIEDO Y LA DESCONFIANZA

La desconfianza contra la vacuna es latente en este pueblo porque se teme que esta pueda dar problemas a la salud.

"Yo he escuchado que si recibes la vacuna después te mueres", dijo el habitante Elías Gómez, quien explicó que al principio de la pandemia la gente en su pueblo no se cuidaba.
Pero ahora, continuó, se abstienen de visitar a familiares y celebrar reuniones. Además, toman muchas plantas medicinales.

Antonio García, otro habitante tzeltal de la zona, no tiene "miedo a la vacuna", pero en su comunidad hay muchos que dicen que la inyección "no es buena".

Y cuestionado sobre si él mismo se vacunaría, dijo: "En su momento, sí, pero siempre y cuando no tenga malas consecuencias. Ya cada uno tomará sus propias decisiones", subrayó este habitante de Chiapas, una de las regiones más pobres de México.

Aunque no todos los residentes opinan lo mismo: "Para mí es bueno, pero la comunidad de Chilólja no quiere y no sé por qué", lamentó Martín Gómez.

No es la primera vez que los municipios indígenas de Chiapas se niegan a aplicar medidas para prevenir los contagios de covid.

Al inicio de la pandemia, autoridades locales de San Fernando, Venustiano Carranza, Las Rosas, Chenalhó, Chiapa de Corzo, Pantepec y Tapalapa, entre otras localidades, se opusieron a las medidas de desinfección y de control de la movilidad para evitar la propagación del virus.

IMCM