Miami está lista para recibir el Super Bowl LIV

Por José Luis Rivera | @jlgoooya

La última parada de la emocionante Temporada 100 de la NFL se disputará este domingo, cuando San Francisco 49ers y Kansas City Chiefs se midan en el Super Bowl LIV en el Hard Rock Stadium de Miami, donde está garantizada una fiesta explosiva entre dos escuadras poderosas.

A los playoffs de la NFL no se llega por casualidad y para pasar las barreras hasta el duelo definitivo se requiere tener mucho talento, y los contendientes cuentan con un arsenal espectacular para ofrecer un partido memorable.

Por los Niners, su fortaleza es la defensiva, que es encabezada por Nick Bosa, un caza mariscales que retará la movilidad de Patrick Mahomes, quien está en una prueba de fuego para consolidarse como la estrella de la liga en los próximos años.

Parte de la estrategia del coach el coach Kyle Shanahan será presionar a Mahomes, pero nunca se sabe lo que pueda hacer el ‘Chico Maravilla’, porque es un quarterback que puede correr y tiene poder en el brazo.

En la parte ofensiva, la principal arma de 49ers es correr el balón, en la final de conferencia de la NFC, la figura fue Raheem Mostert, pero los linebackers de los Jefes, Damien Wilson y Anthony Hitchens, tendrán la misión de detener el ataque terrestre de los californianos.

Aunque ha tenido poca actividad en pases lanzados, el mariscal de campo Jimmy Garoppolo no sólo es un buen administrador de jugadas, también tiene precisión y calidad para colaborar por aire, y tiene en el ala cerrada George Kittle a su mejor hombre, aunque deberán tener cuidado con el safety Tyrann Mathieu, quien es especialista en intercepciones y ha tenido una temporada espectacular.

El choque será muy parejo, la clave será quien gana el duelo entre Mahomes y la defensiva más dominante de la NFL, el quarterback de Kansas City tiene la capacidad para lucirse y levantar la mano para encabezar el cambio generacional, para comenzar a olvidar a Tom Brady, Drew Brees y Aaron Rodgers.

A la ofensiva, Mahomes tendrá como principal aliado a su ala cerrada Travis Kelce, pero también a los receptores Tyreek Hill y Sammy Watkins, quienes tendrán mucha actividad en una tarde en la que se espera una batalla de puntos.

Aunque en Las Vegas ponen a Kansas City con un punto de ventaja, la realidad es que no hay favorito, y lo único que puede ser más certero será que se cubra la línea de altas, de más de 54 puntos, porque la defensa de Chiefs sufrirá los embates por tierra de San Francisco y porque Mahomes encontrará la manera de hacerle daño a los 49ers.