Por Óscar Reyes
Una noche bohemia, así se puede definir el concierto que dio Miguel Bosé en el Zócalo capitalino, el cual pareció un mar de gente que no dudó en cantar los temas del español.
El cantante estremeció a la Ciudad de México con un popurrí en el que incluyó “Sereno”, “ Duende” y “Nena”; posteriormente la gente entró en júbilo cuando Ximena Sariñana apareció y Miguel Bosé la recibió con un beso en la boca. Asimismo, con ella interpretó el tan esperado tema “Aire”.
Involucrado con las causas sociales, Bosé no fue indiferente al muro que quiere construir el presidente de Estados Unidos, Donald Trump: “Las personas se tiñen y les da por levantar muros; no es el mundo que yo quiero”.
Alza la voz
El cantante aprovechó para dar un mensaje especial a los capitalinos: “La paz se trabaja en frentes diferentes, uno de ellos es la solidaridad; es un músculo que tenemos muy atrofiado”.
Entre las sorpresas destacó la presentación de Sasha, con quien cantó “Cómo un lobo”; también interpretó diversos éxitos como “Nada particular”, del cual narró que la escribió en 1992, con el fin de dedicársela a los migrantes de la guerra de la Yugoslavia.
A seis meses de que Juan Gabriel dejara este mundo, el español le rindió un homenaje con la canción “Siempre en mi mente”, la cual la cantó al lado de Pepe Aguilar, mientras que con Paty Cantú sorprendió con el tema “ Amiga”.
La sensualidad inundó la noche cuando “Morena mía” fue cantado al lado de Ana Torroja.
Al terminar “Gulliver” se a pagaron las luces, y cuando ya parecía ser el final del concierto interpretó con Fonseca “Bambú”, después continuó cantando con Beny Ibarra; finalizó la noche con “Amante bandido”.
