Apenas el pasado 4 de septiembre, en la primera sesión de la Cámara de Diputados, cruzaron acusaciones por supuestas agresiones físicas y faltas de respeto, incluso se dijeron insolentes y golpeadores, pero hoy los diputados Porfirio Muñoz Ledo y Gerardo Fernández Noroña fumaron la pipa de la paz.
Muñoz Ledo, presidente de la Mesa Directiva de la Cámara Baja, y el legislador Fernández Noroña aclararon que pese al intercambio verbal que sostuvieron el martes pasado "no pasó nada" ni hay problemas entre ellos.
Dimos una rueda de prensa el diputado @PMunozLedo y yo, superando el encontronazo que tuvimos el martes. pic.twitter.com/hxZmDIz9Il
— Fernández Noroña (@fernandeznorona) 6 de septiembre de 2018
En conferencia de prensa conjunta, coincidieron en que trabajarán para alcanzar la transformación del país y en todo momento apoyarán al presidente electo Andrés Manuel López Obrador para cumplir con las expectativas que tiene la ciudadanía.
Muñoz Ledo afirmó que en San Lázaro habrá plena libertad de expresión para que la labor legislativa sea destacada y notable. Sobre el desencuentro que tuvo con Fernández Noroña reconoció que "Gerardo siempre ha sido así”.
A su vez Fernández Noroña subrayó que siempre ha sido rebelde pues es importante mantener un sentido crítico y privilegiar el debate en la Cámara de Diputados, “pero no pasó nada”.
“Fueron duras las expresiones, ahí están, desde que se murió mi abuelita nadie me regaña” señaló el diputado petista durante la conferencia de prensa. En respuesta Muñoz Ledo contestó, en tono de broma, “a mí sólo mi abuelita me jalaba las orejas”.
