A causa del impacto económico que produjo el alza de combustibles para el sector del transporte público y los elevados insumos sin que hubiera un ajuste en las tarifas para los usuarios, los dirigentes del transporte público concesionado de la Ciudad de México pararon el servicio de cerca de 9 mil unidades, lo que ha provocado desabaste de transporte y pérdidas de aproximadamente 300 millones de pesos.
De acuerdo con los principales líderes del gremio de los transportistas, la falta de recursos ha provocado el estancamiento del programa de modernización del transporte público del Gobierno de la CDMX, y no sólo eso, sino que incluso ha provocado un retroceso en el tema, pues las unidades nuevas se están conviertiendo en chatarra rápidamente por la falta de mabtenimiento, advirtieron.
Jesus Padilla, presidente de la Asociación Movilidad de Vanguardia, indicó que los costos de operación se han elevado en más de 100%, desde que los insumos y el precio de los combustibles incrementaron, mientras que la tarifa no se eleva desde hace 4 años y cuando eso sucedió el incremento fue de sólo el 20 %.
Ante la tarifa insuficiente, los divesros diriogentes del transporte público concesionado adviertieron que en dos meses se podría tener paradas más de 60% de las unidades por falta de recursos, lo que además afectaría la salud de los capitalonos ya que el nulo mantenimiento del transporte aumenta las emisiones de gases contaminantes que estás máwuinas liberan al moverse.
