La Asamblea Legislativa (ALDF) aprobó solicitar al Sistema de Transporte Colectivo (STC) Metro y a las secretarías de Protección Civil, Medio Ambiente y Movilidad redactar la primera Carta de Derechos y Obligaciones de los Usuarios.
El diputado promovente Víctor Hugo Romo presentó el punto de acuerdo que fue aprobado por el pleno, para que dichas instancias instalen una mesa de trabajo que redacte el documento.
El legislador perredista explicó que se trata de elevar la calidad del servicio.
“Es inaplazable el poder ofrecer una red de transporte público que contribuya a mejorar la movilidad ciudadana y el desarrollo sostenible en el área metropolitana, garantizar la prestación de un mejor servicio y desarrollar políticas de responsabilidad social, en un marco de viabilidad y eficiencia económica”.
Por ello, añadió, "el STC deberá comprometerse a realizar las acciones necesarias para garantizar la accesibilidad a sus instalaciones, desde la entrada, transborde y salida”.
Deberá incluir el Derecho a la Información, que implica el compromiso a que el usuario siempre cuente con información actualizada, disponible y visible para facilitar el uso del servicio; dar una mejor atención y ofrecer el mejor trato.
El legislador destacó que el Derecho a la Seguridad “es uno de los factores más relevantes en la calidad del servicio, y el Metro debe velar en todo momento por la seguridad de los pasajeros”.
"Con ello, el sistema de transporte debe garantizar a los usuarios un servicio con un nivel elevado de limpieza y conservación de los trenes en todas y cada una de las estaciones de la red”.
Indicó que el Gobierno de la Ciudad de México debe asumir los compromisos, para que cuando se produzca una interrupción del servicio y el tiempo para restablecerlo sea superior a 15 minutos, el STC Metro otorgue un viaje de canje o cuando la situación lo requiera poner a disposición un transporte alternativo.
Romo recordó que la idea de la construcción del Metro se dio en 1950, “cuando en la ciudad vivían cuatro millones de habitantes y hoy transporta a mil 662 millones de pasajeros al año, siendo el principal medio de transporte de la capital, por lo que requiere constantemente actualizar la calidad del servicio”.
Reconoció que la actual administración ha mejorado significativamente el servicio de este medio de transporte, "rompiendo con una serie de inercias que provocaron que 105 trenes estuvieran detenidos, 150 escaleras obsoletas, 19 elevadores para personas con discapacidad varados y en general una disminución de la capacidad de operación por falta de refacciones y mantenimiento”.
