Los Tiburones Rojos aprietan la lucha contra el descenso
Por: Israel González
Pumas fue su propio enemigo en Ciudad Universitaria. Los felinos se complicaron por sí solos un partido que lucía ideal para meterse de nuevo a la zona de calificación y cayeron 2-0 ante Veracruz. De paso, perdieron a sus máximos referentes del torneo por expulsión.
La tarde se complicó para los dirigidos por Juan Francisco Palencia al minuto 33 con la expulsión del capitán Darío Verón por un pisotón sobre el rival en una jugada pegada a la banda sin aparente riesgo para el paraguayo.
Los Tiburones Rojos supieron aprovechar inmediatamente la ventaja sobre el terreno de juego y al minuto 39 Leandro Velázquez recibió un balón rebotado en un defensor y dentro del área venció a Alfredo Saldívar.
Para la parte complementaria, Palencia habilitó a Alejandro Castro como defensa central y mandó desde el inicio al goleador chileno Nicolás Castillo, quien reapareció después de casi un mes lesionado. Aunque el sudamericano ingresó con mucho ímpetu, el equipo careció de creación de oportunidades de gol.
Los visitantes supieron aguantar la presión del rival y aprovechar la ventaja numérica y a cinco minutos del final obtuvieron la recompensa con su segunda anotación, obra de Cristian Pellerano en un contragolpe.
Pumas fue víctima de la frustración y en los minutos finales Nicolás Castillo y Paco Palencia vieron la tarjeta roja directa por una agresión y por reclamaciones hacia el árbitro, respectivamente.
"Hemos jugado mal y no hay pretextos. Sabemos que hay momentos como estos y hay que salir de ahí. No estamos eliminados matemáticamente y seguiremos peleando. Estamos en un bache pero estamos seguros que lo vamos a revertir", declaró David Patiño, auxiliar técnico de Palencia.
Con este resultado, Pumas se queda en la novena posición con 18 puntos y Veracruz dejó a Morelia en el último lugar de la tabla porcentual y se mantiene con vida en el máximo circuito del fútbol mexicano.
"En un triunfo de oro, llega en el momento justo con los resultados de ayer y nos da un respiro para seguir trabajando. No hay tranquilidad, estamos preocupados porque todavía hay dos partidos en puerta", manifestó el entrenador de los escualos, Juan Antonio Luna.
