Pumas propina cinco zarpazos al Necaxa y tiene fiesta en CU

CIUDAD DE MÉXICO.- El Club Universidad Nacional volvió a regalarle a su afición una tarde mágica en un duelo en el que superaron la adversidad y con cinco zarpazos se impusieron a Necaxa, que demostró que tendrá un buen torneo Apertura 2018.

Ante una gran entrada en el Estadio Olímpico Universitario, Pumas dominó a los Rayos desde el arranque, pero falló las ocasiones de peligro que generó y al minuto 13 Víctor Dávila anotó el gol de la quiniela en la primera llegada de peligro de Necaxa.

En un tiro de esquina, Arribas recentró de cabeza y Alan Mendoza en una genialidad se apuntó un golazo con un remate de primera intención, que conectó de espaldas como karateca, al más puro estilo de Zlatan Ibrahimovic.

FOTO MEXSPORT

Apenas al inicio del complemento Necaxa retomó la ventaja en un tiro libre en los linderos del área, que fue desviado por la barrera y que contó con la colaboración del guardameta Saldívar, porque el cobro fue a su poste.

Con los Rayos todavía en pleno festejo vino la pifia de la zaga hidrocálida, que en una confusión con el portero, le regaló el balón a su excompañero Carlos González, quien aprovechó la cortesía para empatar el encuentro.

La voltereta llegó desde los botines de Martín Rodríguez, quien aprovechó una asistencia de su paisano Felipe Mora para con un toquecito cruzar a Hugo González y poner por primera vez en ventaja a los Pumas.

MEXSPORT

El lateral Alan Mozo fue una pesadilla por la banda derecha y en esos días en los que el futbol premia el esfuerzo, dribló a un par de zagueros y cuando quedó solo frente al cancerbero tiró para aumentar la ventaja auriazul.

Pumas se relajó y pecó de confiado, lo que aprovechó Dávila para con un remate de cabeza marcar su doblete y darle vida momentánea a Necaxa.

Poco le duró el gusto a los Rayos, cuando con la ‘ley del ex’, Carlos González controló desde un costado del área, amagó y luego de la finta disparó cruzado para el zarpazo definitivo que permitió a los felinos volver a rugir en el Olímpico Universitario.

JLR