Roberto Moreno, el mexicano que será ejecutado en EU

Por Vanessa Arriaga

Texas.- Desde el pasado 13 de noviembre, el estado de Texas se preparaba para ejecutar este miércoles al mexicano Roberto Moreno, de 64 años de edad, que fue condenado a pena de muerte en Estados Unidos por el asesinato de su esposa e hijos en 1992.

Por años, el gobierno de México, la Comisión Internacional de Derechos Humanos y la Organización de las Naciones Unidas (ONU), trataron de evitar que se cumpla la condena en contra de Moreno Ramos, quien a las 18:00 horas (hora local de Texas), recibirá una inyección letal en la prisión de Huntsville que le quitará la vida en segundos.

El mexicano fue declarado como culpable en 1993 y se le impugnó esta pena, la cual, muchos consideran como “injusta” ya que, la ONU, ha comunicado que el mexicano tiene una discapacidad psicosocial, por lo que la pena de muerte en su caso es impermisible bajo los estándares internacionales de los derechos humanos.

Asimismo, han declarado que las autoridades de Texas no notificaron al consulado mexicano sobre la situación de Roberto Moreno, lo que le impidió contar con el apoyo jurídico necesario para su caso.

La Corte Internacional de Justicia también intervino en el proceso y señaló que el gobierno estadounidense incumplió sus obligaciones internacionales señaladas por la Convención de Viene sobre Relaciones Consulares y ordenó que no se hiciera la ejecución hasta que se realizará nuevamente el juicio y la imposición de una codena, hecho que no ocurrió, pero, al menos, lograron darle un amparo y retrasar la condena por unos años.

El pasado lunes, la Junta de Persones y Libertades Condicionales de Texas, determinó que no se le otorgaría clemencia al mexicano y, a unas horas de que se cumpla la sentencia, no se ha hecho ninguna declaración respecto al tema, lo que indica que Moreno Ramos será ejecutado.

Sin embargo, aún cabe una pequeña posibilidad de que se reconsidere la acción y el único que puede intervenir para aplazar la pena por 30 días, es el gobernador texano, Greg Abbott.

El día del crimen

El 7 de febrero de 1992, Roberto Moreno asesinó a su esposa Leticia, de 42 años, y a sus dos hijos, Abigail, de siete años, y Jonathan, de tres. Los enterró en su domicilio y siguió con su vida.

A los pocos días, su cuñada comenzó a preguntar por su hermana y sus sobrinos, a lo que el condenado respondió que habían muerto en un accidente, pero la inconsistencia de la historia obligó a la hermana de Leticia a denunciar el caso.

El 30 de marzo, las autoridades de Texas arrestaron al mexicano y el 7 de abril encontraron los cuerpos de sus víctimas.

Moreno Ramos nunca confesó los asesinatos y su abogado alegó que fue obra de un grupo de narcotraficantes, sin embargo, la justicia determinó que él era culpable y en 1993 le dictaron la sentencia.

En Estados Unidos, la pena de muerte se restituyó hace cuatro años, desde esa fecha, han sido ejecutados 33 extranjeros, entre los cuales había 11 mexicanos.