Oaxaca.- Los sismos de 7 y 19 de septiembre del año pasado afectaron a varias localidades del país, pero, sin duda, una de las más perjudicadas fue Oaxaca, entidad que fue sacudida por dos terremotos que dejaron cerca de 80 mil damnificados, de los cuales 50 mil siguen sin recibir apoyo.
La senadora oaxaqueña de Morena, Susana Harp, dijo en conferencia de prensa que sólo 30 mil de los afectados en Oaxaca han recibido algún tipo de atención, por lo que exigirá a las autoridades federales y estatales que se rindan cuentas respecto a los recursos que iban a ser destinados a los estados dañados.
Hoy pediré punto de acuerdo para evaluar avances de la reconstrucción a un año del sismo de 8.2 grados Richter principalmente en los estados de Oaxaca y Chiapas. #RendiciondeCuentas SEDATU, SECRETARIA DE GOBERNACIÓN, INFONAVIT, FOVISTE y la SEP. pic.twitter.com/vhAzyihal8
— Susana Harp Iturribaria (@SusanaHarp) 6 de septiembre de 2018
Agregó que tampoco hay un censo que puntualice específicamente cuántas son las escuelas afectadas y el nivel de daño que presentan.
Por ejemplo, en Juchitán, sólo se ha reconstruido una escuela, el Centro Escolar Juchitán; pero el resto de los estudiantes, deben tomar clases bajo lonas o a la intemperie.
Lo anterior, perjudica directamente a los menores ya que cuentan con pocos recursos para asistir y tomar sus clases. Además, los profesores no pueden impartir en su totalidad los contenidos para las asignaturas al no contar con los materiales didácticos necesarios y, hasta el momento, se estima que ello ha generado un déficit de entre el 20 y 30% en la educación de la entidad.
Otro de los grandes retos a los que se deben enfrentar es el miedo con el que viven los oaxaqueños, pues los temblores nunca cesan, pero más allá de eso, hay cosas materiales que no los dejan olvidar como los escombros de sus casas o escuelas que siguen sin ser desplazados de las zonas afectadas.
Lo anterior, implica que se sientan inseguros y no puedan “regresar a la normalidad” porque todo está prácticamente destruido y esto afecta principalmente a los pequeños que no pueden entender del todo la situación.
“El espacio donde estaba la escuela está inservible, en las aulas provisionales muchos de los espacios son de terracería, no se sienten con libertad de salir a jugar en las casas que no son de ellos, necesitan espacios de recreación en la escuela y en la casa, eso es lo mínimo que necesita un menor”, señaló Fany Jiménez del DIF Juchitán.
Susana Harp señaló que este es un problema grave que ha perdido visibilidad poco a poco y ello genera que, tanto la ciudadanía como las instituciones, no volteen a ver las necesidades que tiene Oaxaca.
El gobierno federal, destinó siete mil 362 millones 500 mil pesos para las labores de reconstrucción, pero el avance de esto es de apenas un 34.3%.
Al respecto, el secretario de las Infraestructuras y el Ordenamiento Territorial Sustentable (SINFRA), Fabían Herrera Villagómez, declaró que el gobierno de Oaxaca ha sido incapaz de concluir la reconstrucción del Istmo a un casi un año del terremoto del 7 de septiembre.
Añadió que se requerían más de 40 mil trabajadores para las viviendas, escuelas y calles, al no contar con dicha cantidad de personal, las obras podrían tardar, por lo menos, dos años, pero, al no registrar un avance ni del 50%, es probable que sean muchos más.
Vah
