México.-Servando de la Cruz Reyna, investigador del Departamento de Vulcanología del Instituto de Geofísica (IGEF) de la UNAM, aseguró que luego de los sismos de 2017 la actividad del volcán Popocatépetl cambió. “No es un aumento de la actividad es un cambio de estilo”, afirmó.
“Éste es el cambio más importante que se ha observado y es lo que se tomó en cuenta para aumentar la guardia y analizar las cosas con mayor detalle”, destacó en conferencia de medios, en las instalaciones del Servicio Sismológico Nacional, el especialista.
Explicó que en 25 años de actividad, es la primera ocasión que se observan explosiones importantes sin necesidad de la presencia de un domo, pues precisó que desde 1994, cuando el coloso retomó su actividad, requería de la presencia de un domo o tapón que limitara la salida de gases y material rocoso para hacer erupción.
Respeta el radio de seguridad de 12 km del volcán #Popocatépetl. pic.twitter.com/7PfM1tkwfj
— PC Estatal Puebla (@PC_Estatal) 2 de abril de 2019
Expertos del IGEF coincidieron en que la frecuencia de explosiones no ha aumentado, sino que lo que varió es su naturaleza, lo que podrían llevar a que el coloso continúe en los próximos meses con actividad intensa-moderada en la que los gases se acumulan por horas o días y son liberados sin problema.
¿Conoces las fases del Semáforo de #AlertaVolcánica del #Popocatépetl? Consúltalas aquí: pic.twitter.com/xJJZUae3am
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Al respecto, Robin Campion, experto del Departamento de Vulcanología indicó que “una de las características del Popo es que 98 por ciento del material que emite se queda en la superficie misma del volcán, y sólo dos por ciento sale de él”, señaló que “hasta el momento, se ha visualizado un aumento en el diámetro del cráter y se ha hecho más profundo”.
Esto ha llevado a los expertos a determinar tres posibles escenarios del comportamiento que tendrá el coloso en el futuro inmediato. El primero: que regrese a la actividad que ha tenido en los últimos 25 años; el segundo, el más probable, es que continúe con la actividad actual, con intensidad moderada y el tercero es que después de un largo periodo sin explosiones ni emisiones de gases, la presión acumulada sea liberada de forma rápida, provocando una erupción de gran magnitud, lo cual es poco probable.
En tanto, Hugo Delgado Granados, director del IGEF, resaltó que las decisiones recientes que han tomado las autoridades respecto al comportamiento del coloso cuentan con respaldo de los científicos de la UNAM, quienes han aportado un análisis más preciso.
El semáforo de alerta volcánica del #Popocatépetl se mantiene en #AmarilloFase3; conocer las medidas preventivas y las rutas de evacuación son primordiales para enfrentar cualquier contingencia. #ResponsabilidadCompartida pic.twitter.com/W8OpjPJeKE
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Por su parte, Ana Lillian Martín del Pozzo, experta en el estudio de ceniza volcánica y también miembro del Comité Científico Asesor del volcán Popocatépetl, informó que los residuos que emite el volcán han pasado de ser rocosos a un compuesto más fino, por lo que ya se contactaron con las autoridades de salud y con Protección Civil para hacer las recomendaciones pertinentes a la población que vive cerca:
“Es pertinente el uso de tapabocas, especialmente el que es doble o que se ajusta a la nariz; cubrir la piel porque puede ser dañada, al igual que los ojos. Evitar las actividades al aire libre, es mejor quedarse en casa, y si es necesario salir, utilizar protección”, concluyó.
En caso de caída de #CenizaVolcánica tome en cuenta las siguientes recomendaciones para proteger tu salud y la de tu familia. en #AmarilloFase3 pic.twitter.com/ofGZqdzpBM
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