Sofía Alejandra: Su música es biografía

Por Carlos Meraz

La música es su biografía y Sofía Alejandra no suele cantar composiciones que no siente o no ha vivido en carne propia y/o a través del entorno social, ya que para la debutante cantautora  tamaulipeca los temas son una suerte de radiografía del autor y el intérprete, ambas facetas parte de su incipente carrera musical.

Tras lanzar su primer sencillo, la canción con sonidos latinos y de su autoría Mi pecado favorito, con un clip rodado en las playas de Sayulita, en la Riviera Nayartit; ahora estrena el segundo single Cicatrices, una melodía de pop urbano de la que es coautora y cuya temática aborda el duelo sentimental tras una ruptura amorosa, con un video filmado en el Estado de México e Hidalgo.

La siguiente pieza a promocionar será la balada de su autoría No te lo mereces, que junto con las demás serán parte de un futuro EP.

Los dos actuales tracks de Sofía Alejandra fueron producidos por Baby Noel —quien ha trabajado con artistas como Franco de Vita, Paulina Rubio y Nicky Jam—  y se grabaron en Madrid, España.

SERÍA UNA TORTURA VIVIR SIN INTENTAR
Sofía Alejandra estudió el Grado de Artes Escénicas e Interpretación en Transforming Arts Institute (TAI), en Madrid, España.

“Mi música es optimista, es para bailar, tiene se lado intenso que yo tengo en mi manera de ser, profunda y directa, pues digo las cosas como son, pero con poesía y aderezadas con metáforas.

“Yo no canto lo que no siento. Es el sello de Sofía Alejandra. me gusta interpretar y si digo que me duele es porque eso me pasa o me sucedió. Irremediablemente me meto al papel de las canciones”, afirmó.

Su EP, con título por definir, se editará  este año e incluirá estrictamente temas inéditos de su inspiración.

Las presentaciones en directo, agregó la cantautora tamaulipeca, empezarán a partir de la aparición del cuarto sencillo. 

“El disco es una parte de mi, es mi biografía, pero también aglutina circunstancias que necesariamente no son parte de mi vida personal. Como dice una estrofa de Mi pecado favorito: ‘Sería una tortura vivir sin intentar’”, concluyó Sofía Alejandra.