Durante este miércoles, se concluyeron las tareas de rehabilitación de la Glorieta de Insurgentes, espacio de 17 mil metros cuadrados que no recibía mantenimiento desde 1969.
La obra, que requirió 127 millones de pesos de inversión, estuvo a carago de la Agencia de Gestión Urbana (AGU) y la Secretaría de Obras y Servicios (Sobse) de la Ciudad de México.
En el sitio fueron renovadas y ampliadas las instalaciones eléctricas, hidráulicas y sanitarias. Se instalaron tres bombas para el desalojo de aguas negras y se renovaron 210 metros de dicho entubado, se restauraron 300 metros lineales de la red de drenaje y se brindó mantenimiento a cuatro cárcamos.
Además, fueron construidos cuatro módulos sanitarios y se amplió y remodeló la estación de Metrobús Insurgentes, en ambos sentidos, con lo cual dichas plataformas podrán albergar a dos unidades de camiones articulados al momento de abordar o descender en la Línea 1.
Las obras de la Glorieta también incluyeron la rehabilitación de las inmediaciones viales, con lo cual se implementó señalética y se remozaron 8 mil 500 metros cuadrados de banquetas y guarniciones.
Asimismo, tres pasos seguros fueron inaugurados en los cruces de la avenida Chapultepec y Orizaba, avenida Insurgentes y calle Puebla, avenida Chapultepec y Monterrey-Florencia.
Con fin de mejorar el paisaje urbano, 36 locales sufrieron modificaciones, 42 luminarias fueron instaladas y se construyeron dos fuentes bailarinas con iluminación propia.
Al interior de la Glorieta, fueron instalados 14 cobertizos para el resguardo del sol, mismos que cuentan con alumbrado y conexión eléctrica, tanto para clavijas trifásicas como para conectores USB.
En cuanto al decorado, fue pintada la red de Transporte Colectivo (STCM) Metro y fueron rehabilitados 500 metros cuadrados de áreas verdes, a los cuales se les instalarán luminarias.
