Tigres no dio lugar a las sorpresas en la frontera y se calificó a la final por segundo torneo consecutivo, luego de vencer a Tijuana 2-0 (4-0 global) y chocará contra Chivas en busca del bicampeonato.
Tijuana tenía la encomienda de marcar dos goles y no recibir ninguno, luego de la derrota del jueves 2-0 en la cancha de los Tigres, por lo que los fronterizos propusieron el partido desde el primer minuto.
La primera llamada de atención llegó a los 13 minutos, cuando Milton Caraglio remató un centro retrasado con el cual intentaba hacerle un sombrerito al portero Nahuel Guzmán, pero el argentino reaccionó de forma espectacular para manotear el balón prácticamente en la línea de gol.
Sin goles durante el primer tiempo, Xolos se complicó la eliminatoria en el arranque del complemento cuando Guido Rodríguez detuvo con una falta a Guido Pizarro en los linderos del área y se ganó su segunda tarjeta amarilla, por lo Tijuana se quedó con 10 hombres en la cancha.
Tigres jugó con la desesperación de su rival, controló el balón, cortó el ritmo del local y encontró el premio al minuto 64, cuando Gignac, acorralado pegado a la banda izquierda, se las ingenió para soltar el balón con un taconazo, que habilitó a Javier Aquino, quien arribó por el costado izquierdo del área a toda velocidad y definió con un disparo al ángulo.
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El gol de visitante de Tigres obligaba a Tijuana a marcar cuatro tantos en los 26 minutos finales, por lo que Miguel Herrera decidió sacar de la cancha a su hombre más talentoso, Avilés Hurtado, quien arrastraba lesiones desde la última parte del torneo regular.
El ecuatoriano salió ovacionado de la cancha, pues pudo ser su último duelo con el equipo fronterizo y en tiempo agreagado, Jurgen Damm firmó el 4-0 global.
