Los transportistas colectivos no pueden continuar con su operación después del incremento a la gasolina. Así lo afirmó el presidente de la Asociación Mexicana del Transportistas y Movilidad (AMTM) Jesus Padilla Zenteno, tras destacar que se opera con tarifas desde el 2013, lo cual hace que el impacto de las alzas sea mayor.
"Muchas empresas ya nos encontramos con problemas serios de liquidez", expresó Padilla Zenteno.
"No podemos seguir absorbiendo tantos impactos en tecnología y de la situación que vive el país en materia de energéticos y la situación mundial financieramente hablando".
"La política energética y de liberación de los precios del petróleo nos ha impactado en un 60 por ciento", agregó, "Somos un gremio solidario y hemos mantenido nuestra tarifa desde el 2013, el último ajuste nos ha impactado no con el 20 por ciento sino con 60 por ciento en el aumento del combustible, pues era 60 por ciento más económico en el 2013".
Padilla explicó que otro impacto que ha agraviado la situación es la depreciación del peso, que también en los últimos cuatro años bajo en un 60 por ciento.
El deterioro de la imagen de las unidades y la mala calidad de servicio son una consecuencia de no tener los recursos suficientes, destacó.
"Esto no se lo puede permitir una ciudad que compite todos los días con las primeras del mundo".
