La Federación de Futbol de Grecia anunció un severo castigo al presidente del PAOK, el ruso Ivan Savvidis, quien en el 12 de marzo ingresó armado a la cancha para amenazar al árbitro del partido contra AEK Atenas tras anularle el gol del triunfo a su equipo en tiempo de compensación.
Tras el incidente la liga griega fue suspendida a lo largo de tres semanas, el gobierno intervino para investigar los sucesos y la FIFA llegó a contemplar la opción de descender al club y desafiliar al futbol helénico de las competencias de la UEFA.
Sin embargo, Savvidis cargará con todo el peso de los castigos, pues fue suspendido durante tres años, lapso en el que no puede ingresar a ningún estadio de futbol.
Además deberá pagar una multa de 100 mil euros y a su equipo le fueron restados tres puntos, por lo que queda prácticamente sin opciones de campeonato.
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La FIFA quedó conforme con la forma de actual por parte de las autoridades griegas y retiró por el momento la amenaza de desafiliación.
Tras las resoluciones, la liga de Grecia volverá a la actividad este fin de semana.
