Veracruz: la tierra de la ingobernabilidad y la violencia

 

La violencia, la inseguridad, la corrupción y la ingobernabilidad que han hecho de Veracruz uno de los peores estados para vivir en el país no es nada nuevo.

Los problemas que afectan a esta entidad actualmente podríamos decir que comenzaron con la gubernatura de Fidel Herrera, el antecesor de Javier Duarte, quien junto con el actual presidente de la República, Enrique Peña Nieto, se encargó de promover y candidatear a, quizá, el mayor responsable de la tragedia en la que Veracruz se ha convertido: Javier Duarte de Ochoa.

Con una deuda de aproximadamente 44 mil millones de pesos y con un nivel de violencia que ha ido en aumento en los últimos 8 años, Veracruz, se ha convertido en una tierra de sangre y fuego.

Actualmente, ocupa el tercer lugar más peligroso para ejercer el periodismo a nivel mundial, sólo por debajo de países como Siria o Irak que se encuentran en Guerra.

Pero más allá de la situación que viven los comunicadores, preocupan la impunidad, la corrupción y la ingobernabilidad que reinan en la región y son el núcleo de tantos otros problemas que el estado tiene por resolver.

Como prueba de la situación por la que atraviesa el estado de Veracruz tenemos tres noticias que en días recientes se han difundido a través de distintos medios y que reflejan el día a día que viven y sufren cientos de veracruzanos.

Empecemos por los 11 cadáveres que fueron encontrados dentro de una camioneta luego de que el actual gobernador, Miguel Ángel Yunes Linares, quien a través de falsas promesas y en medio de diversos escándalos de corrupción ganó las elecciones pasadas del 5 de noviembre, junto con Osorio Chong presentaran una nueva estrategia de seguridad para la región.

A pesar de que Yunes y Chong dijeron que no era una afrenta por parte del narcotráfico que tiene dominado la región, la declaración parece difícil de creer, pues los cuerpos se encontraron con rastros de tortura y con una cartulina con un mensaje por parte de los atacantes.

A principios de año, tras el alza en los precios de las gasolinas, dos turistas fueron masacrados con balas de uso exclusivo del ejército y otros tres turistas que acompañaban a las víctimas desaparecieron, testigos acusan a los marinos como los responsables. Las autoridades no han podido resolver ninguno de los ilícitos.

Por último, el día de ayer y nada más como prueba del poco respeto que se tiene por las autoridades y de la ingobernabilidad que reina en la región, se registró un ataque por parte de un grupo de 50 hombres armados con machetes y armas de fuego a la base de la policía federal en Río Blanco.

En este caso los delincuentes estaban tratando de recuperar un camión de combustible robado que las autoridades habían decomisado. El altercado dejó a tres agentes heridos, 11 detenidos y se recuperó un arma de fuego cuatro vehículos y varios machetes, así como los casquillos percudidos.

Esto es Veracruz y ha sido por lo menos los últimos cinco años, y al parecer ni el Partido Revolucionario Institucional que gobernó durante décadas la entidad, ni la actual administración panista, han podido hacer nada al respecto. Mientras tanto, los ciudadanos siguen siendo las víctimas de los malos gobiernos y de las autoridades corruptas.