Batalla de gigantes: Paramount desafía a Netflix por el control de Warner Bros. Discovery

Gurra cinematográfica

Por Alejandro Ávila Peña 

Ciudad de México. –  En los últimos días la industria del cine se ha adentrado a uno de los momentos más tensos en su historia; y es que a partir de que Warner Bros anunciara su venta, los pronósticos apuntaban a un posible comprador por parte de uno de los estudios más grandes; la sorpresa, fue que el gigante del streaming, Netflix diera el primer paso, en esta venta que, de concretarse, cambiara las reglas del entretenimiento audiovisual. 

La lucha por adquirir Warner Bros. Discovery (WBD) entre dos gigantes de la industria audiovisual, Netflix y Paramount Skydance, abre la puerta a una mayor concentración empresarial en un sector que ya está dominado en Estados Unidos por un puñado de grandes grupos que aglutinan cine, medios, televisión y streaming. Este enfrentamiento por los activos estratégicos de WBD —que incluyen cine, streaming y televisión— se ha convertido en una pugna decisiva para el futuro del mercado.

A continuación, analizamos a detalle todo lo ocurrido en los últimos días, y el por qué esta venta no solo es un golpe al entretenimiento, sino a la cultura global. 

Dos Ofertas, Destinos Diferentes

Paramount lanzó una oferta hostil valorada en aproximadamente 108.000 millones de dólares, un movimiento que desafía un acuerdo previo que Netflix había alcanzado para adquirir la compañía por 82.700 millones de dólares, incluyendo la deuda.

 Las ofertas son financieramente distintas. Paramount propone $30 dólares por acción en efectivo, superando los $27.75 dólares que ofreció Netflix. Aunque Netflix ha expresado estar "superconfiada" en su acuerdo previo, el destino de la operación depende ahora de los accionistas de WBD y de las evaluaciones regulatorias estadounidenses.

Los accionistas tienen un plazo aproximado hasta el 8 de enero de 2026 para deliberar sobre la oferta de Paramount. Si Paramount logra imponerse, consolidaría un conglomerado audiovisual más integrado, combinando producción, streaming, canales de cable y noticias, lo que aumentaría sustancialmente su poder de mercado. Por el contrario, si Netflix mantiene su acuerdo, reforzaría su liderazgo en el streaming al integrar franquicias históricas de Warner, pero sin incluir los canales de cable.


El Respaldo Político y Financiero de la oferta de Paramount


La oferta de Paramount cuenta con un inusual y significativo respaldo financiero. La oferta hostil está respaldada por fondos de Arabia Saudí, Catar y Abu Dabi, quienes aportarían capital para cubrir parte de los $41.000 millones de dólares en equity, complementando los $54.000 millones en deuda asegurada con bancos estadounidenses.

Además, Jared Kushner, exasesor y yerno de Donald Trump, participa a través de su firma de inversión privada, Affinity Partners, volviendo a la escena con un papel decisivo en la operación. 

Medios especializados han señalado que esta combinación de capital extranjero y actores vinculados a la política marca "un giro poco habitual en operaciones de esta magnitud". No obstante, para evitar problemas regulatorios, los fondos soberanos renunciarían a derechos de gobernanza sobre Warner y no influirían directamente en las decisiones estratégicas de la compañía.

Riesgos Regulatorios y la Reacción Política

En un escenario tenso, si la propuesta se presenta directamente a los accionistas (como en el caso de Paramount), son ellos quienes deciden si venden sus acciones. La operación requiere la aceptación de la mayoría de los accionistas con derecho a voto, además de superar rigurosas revisiones regulatorias en materia de competencia y seguridad nacional.

Las preocupaciones políticas sobre la concentración y la influencia extranjera ya han resonado. La senadora demócrata Elizabeth Warren calificó la oferta de Paramount como "un incendio antimonopolio de cinco alarmas", advirtiendo sobre los riesgos de "influencia política, favoritismo y seguridad nacional" si la operación llega a prosperar. Los accionistas podrían inclinar la balanza hacia Paramount si consideran que su oferta es más ventajosa, lo que podría desencadenar nuevas negociaciones.


El Futuro del Sector Audiovisual

La industria audiovisual de EE. UU. ya está controlada por un pequeño grupo de conglomerados, entre los que destacan Disney (propietaria de Hulu y ESPN), Warner, Paramount, Comcast‑NBCUniversal y Netflix. Estos gigantes controlan la producción y distribución global de contenido, generando ingresos millonarios.

Analistas señalan que la disputa por Warner podría reducir la fragmentación del sector, ya que "la industria de medios necesita consolidarse" ante la presión de plataformas de streaming "cada vez más grandes". Una fusión entre estudios y servicios de streaming podría incluso beneficiar al sector publicitario al simplificar la relación con anunciantes y centralizar inventario. La oferta de Paramount, según expertos, "intensifica el impulso hacia nuevas alianzas, fusiones y adquisiciones" en respuesta a la constante presión por contenido prémium y la captación de suscriptores globales.

Con un panorama incierto, es de decirse que el comprador vencedor, no solo tendrá en su poder licencias que explotar; sino que dicha compra, significara un control mediático y cultural; pues es de mencionarse el poder del audiovisual como constructor cultural, y es por ello que, esta adquisición, daría un impacto a futuro a la cultura del siglo XXI
 

Síguemos en Google News