CA7RIEL & Paco Amoroso: Bárbaro encuentro con CDMX
Por Brandon Díaz de León
Ciudad de México.- El regreso de CA7RIEL & Paco Amoroso a la capital se convirtió en uno de los conciertos más esperados desde su anuncio, ya que, en tan solo un día, lograron vender todo el boletaje disponible, levantando aún más la expectativa entre sus seguidores sobre lo que ocurriría la noche del 15 de agosto en el ‘Domo de Cobre’.
Cálido recibimiento
Se percibía un ambiente efusivo, algo que se contagiaba con tan solo ver a gran parte de los asistentes portando el ushanka (sombrero ruso) que recibió popularidad entre sus seguidores desde que Paco lució uno para la grabación del Tiny Desk. Pasadas las 20:15 h los protagonistas salían a escena para recibir el amor de México posando en medio de dos inflables de cabezas gigantes que abarcaban muy buena parte de la tarima. Con el respaldo de su ensamble musical, daba inicio el tan ansiado ‘PAPOTA Tour’ con ‘DUMBAI’, ‘BABY GANSTA’ y ‘MI DIOSA’.
Agradecidos con México
El juego de cámaras hacía sentir más cerca al dúo del público a través de las pantallas. Por donde se viera había algo a destacar: desde CA7RIEL jugueteando con la guitarra, la banda en vivo que los acompañaba con percusiones, trompetas, saxofones, teclados, guitarra y bajo, o la irreverencia de Paco al micrófono, quién aprovechó para decir lo bueno que era regresar: “Estamos agradecidos con México ¡Vamos a volver todas las veces que quieran!”.
Lucen en conjunto y por sí mismos
La energía siguió acompañando el encuentro durante el momento más tranquilo de la noche: “Llegó el momento de las baladas. Pueden tomar algo o ir al baño mientras los románticos como nosotros cantamos.” – dijo CA7RIEL previo a que el recinto se iluminara gracias a las lámparas de los asistentes para ‘PIRLO’. Los láseres que llegaban de lado a lado opacaban visualmente a los lanzallamas que también estuvieron presentes en el show, donde los argentinos tuvieron oportunidad de lucir por sí mismos en espacios individuales.
Efímero y sin decepcionar
‘#TETAS’, ‘EL DÍA DEL AMIGO’ Y ‘ÉL ÚNICO’ fueron de las más coreadas de una noche fugaz con poco más de hora y media de duración. No hubo espacio más que para disfrutar y dejarse llevar por las melodías, mismas que eran acompañadas por aplausos, baile y algunas lágrimas que se desbordaban gracias a este magno encuentro donde una vez más se demostraba que el arte, en cualquiera de sus presentaciones, es un bálsamo para el corazón.