Líder de Los Tigres del Norte anticipa crisis en el género del corrido
Jorge Hernández, emblemático vocalista y acordeonista de Los Tigres del Norte, ha expresado su preocupación por la creciente censura que enfrentan los intérpretes de corridos, particularmente el subgénero del narcocorrido. En una reciente entrevista, el músico recordó un episodio similar ocurrido hace más de una década en Chihuahua, lo que lo lleva a considerar que el género podría estar en una crisis que requiera una reinvención en su denominación.
Hernández rememoró que en mayo de 2014, durante una presentación en un palenque chihuahuense, una autoridad local solicitó a la agrupación no interpretar canciones cuyas letras pudieran incitar a la violencia, un problema álgido en la región en aquel entonces. Con disposición, Los Tigres del Norte accedieron a excluir de su repertorio temas como "Jefe de jefes" y "La granja", que inicialmente estaban programados.
El vocalista destacó la comprensión del público esa noche, quienes ovacionaron a la banda y disfrutaron de su extenso catálogo de éxitos que los han mantenido como referentes del regional mexicano por más de cinco décadas. "Nosotros tenemos canciones que, si pidieran que no cantáramos corridos, podemos salir con todo sin cantarlos", afirmó Hernández.
Sin embargo, el músico sinaloense no ignora que la actual ola de censura contra los narcocorridos podría eventualmente alcanzarlos, lo cual lamenta profundamente. Para Hernández, al igual que un periodista narra la realidad a través de sus reportajes, Los Tigres del Norte utilizan su música para contar las vivencias de miles de personas. "Como un periodista, que narra, escribe y pone las cosas que sucedieron en palabras que la gente puede entender, (...) es el público quien decide si te escucha, las historias que cantamos tocan esa vena importante de nuestro cuerpo, (esa) que te hace reaccionar, somos narradores de la vida de las personas", reflexionó.
El líder de la legendaria agrupación considera que no solo el narcocorrido, sino el género del corrido en general, se encuentra en una encrucijada. A pesar de las declaraciones a nivel federal que niegan una prohibición explícita, Hernández señala que a nivel estatal y municipal la situación es diferente, con autoridades locales pidiendo o prohibiendo la interpretación de ciertos temas. "Supuestamente, nuestra presidenta dice que no está prohibido, pero los presidentes municipales de cada área prohíben o te piden que no cantes ese tipo de canciones", puntualizó.
Ante este panorama, Hernández cuestiona la lógica detrás de la censura musical, preguntándose si la misma vara se aplicará a otras formas de expresión artística que también retratan la violencia en el país, como el cine. "¿A veces los análisis de las películas, el cine, que es visual, son más reales. ¿Cómo una canción puede ser más fuerte que una película? Me pregunto si para ellos hay prohibición o nada más para las canciones?", opinó.
Finalmente, Jorge Hernández vislumbró una posible solución para sortear la censura: renombrar el género. Sugirió que en lugar de "corridos", podrían comenzar a llamar a sus canciones "historias", enfatizando su rol como narradores de la vida cotidiana de su público. "Creo que le vamos a tener que cambiar la palabra corrido. Vamos a tener que decir historias, para no meternos en problemas", concluyó el icónico músico.