Microsismos son producto de la reactivación de un enjambre: UNAM

Redacción

Ciudad de México.- Debido a los reiterados microsismos que perjudican a la Ciudad de México desde este año, Arturo Iglesias Mendoza, jefe del Servicio Sismológico Nacional (SSN), instancia adscrita al Instituto de Geofísica (IGf) de la UNAM, aseguró que estos movimientos telúricos se deben a la reactivación de un enjambre que comenzó a generar este tipo de fenómenos entre marzo y abril en el poniente de la capital, específicamente en la zona de Mixcoac y Plateros. 

“Al reactivarse la secuencia el 12 de diciembre pasado, hubo tres sismos que se percibieron claramente y en total hubo 11 movimientos telúricos, ocho de ellos prácticamente imperceptibles, agregó Iglesias Mendoza en la Gaceta UNAM. 

Según el experto, en ocasiones, es común tener varios temblores en corto tiempo, fenómeno que dijo, que en sismología se conoce como enjambre o secuencia, y en ellos muchas veces las magnitudes son parecidas.  

“No necesariamente hay un sismo grande y luego réplicas, sino que a veces ocurren temblores de tamaños equivalentes y del mismo origen, que probablemente correspondan a la misma falla”, detalló en el texto. 

Iglesias Mendoza recalcó que se trata de sismos superficiales, dado que tienen características similares y ocurren en el Eje Volcánico, que es el sitio donde vivimos en la capital del país, además, insistió que este tipo de eventos no son nuevos, aunque reconoció que parecen serlo porque en este año han sido más frecuentes. 

“En la década de 1980 fue un fenómeno muy bien documentado con una secuencia similar justo en la misma región. Lo que ha cambiado es la capacidad de registro, que ahora ha aumentado mucho”, anotó. 

SIN DILUCIDAR TERREMOTOS 

Con base en el especialista, aún no existe respuesta sobre si los enjambres o secuencias pueden presentarse en sismos de mayor magnitud, dado que la intensidad de un sismo está relacionada con el tamaño de la falla, al tiempo que enfatizó que la Ciudad de México resulta complicada para el mapeo de anomalías de esta índole, dado que toda la urbe se encuentra por encima. 

Apuntó que aunque los microsismos se sienten de manera intensa en la zona epicentral, pero que rápidamente atenúan sus ondas, por lo que en regiones como Iztapalapa no se perciben, es necesario estar pendientes ante cualquier posibilidad de una eventualidad de mayor magnitud. 

IMCM