Ciudad de México.- Ante la invasión de Rusia a Ucrania, el Senado de la República reaccionó 35 días después e hizo un pronunciamiento para solidarizarse con el pueblo y gobierno ucraniano.
Durante la sesión ordinaria y a propuesta de Héctor Vasconcelos, presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores, Cora Cecilia Pinedo Alonso, senadora del Partido del Trabajo (PT) y secretaria de la Mesa Directiva, leyó el pronunciamiento, en donde se omitió el nombre de Rusia y del presidente de dicho país, Vladimir Putin.
El Senado manifestó su preocupación por las graves violaciones cometidas en contra de la población civil y expresó su solidaridad con ese país ante la agresión de la que está siendo objeto.
“Manifestamos nuestra condena al hecho de que esta invasión haya causado y siga causando muertes en la población civil y el desplazamiento de millones de personas y ante el riesgo de la pérdida de su vida y la destrucción indiscriminada de su infraestructura, buscan refugio en naciones vecinas”, leyó la senadora.
Asimismo, la Cámara Alta expresó su beneplácito a la resolución propuesta por México y Francia, que aprobó la Organización de las Naciones Unidas (ONU) el pasado 24 de marzo, en la que se hizo un llamado al cese inmediato a las hostilidades de Rusia contra Ucrania, así como a la protección de los civiles y al respeto al derecho internacional humanitario.
Manifestó su rechazo al uso de armas explosivas, químicas o nucleares en las zonas pobladas y en contra de los ataques militares contra civiles y bienes de carácter civil como residencias, escuelas y hospitales que son intolerables.
“Hacemos un llamado al respeto de los derechos humanos y el derecho internacional humanitario, así como a garantizar la protección de la población civil y permitir el acceso a Ucrania a todas las organizaciones humanitarias sin restricciones para que puedan prestar apoyo a la población civil”, indica el texto.
Además, el pronunciamiento señala que esta situación “nos lleva a una realidad inaceptable, hoy en esa región del mundo se ha provocado el mayor éxodo de refugiados desde la Segunda Guerra Mundial”.
“Lamentamos que la población civil ucraniana, particularmente, los grupos en situación de vulnerabilidad, como personas mayores, con discapacidad, mujeres y niños no tengan acceso a agua, alimentos, electricidad y medicinas, ni a la infraestructura básica y servicios de salud”, añade el documento.
