Kabul.- Al menos seis personas perdieron la vida y 15 sufrieron heridas este martes en los atentados con bomba en una escuela en un barrio hazara del oeste de Kabul, informó la policía.
El portavoz de la policía de Kabul, Khalid Zadran, dijo a Efe que tres explosiones se produjeron en la escuela Abdul Rahim Shaheed y en el centro de formación Mumtaz en Dashte Barchi, que alberga a una gran población de la perseguida minoría étnica hazara.
El portavoz del Ministerio del Interior, Abdul Nafi Takor, dijo a Efe que las explosiones se cobraron al menos seis muertos y más de 15 heridos.
“Es probable que la cifra aumente”, dijo Takor.
Khalil, testigo del ataque, dijo que al menos ocho personas perdieron la vida y más de 40 resultaron heridas.
Dijo que se desencadenaron dos explosiones utilizando un dispositivo de "control remoto".
La ONG italiana Emergency, que dirige uno de los principales hospitales de Kabul, tuiteó que habían recibido al menos siete heridos.
Varios periodistas recurrieron a las redes sociales para quejarse de que los talibanes les prohibieron acceder al sitio.
Las imágenes en línea supuestamente del ataque compartidas en los sitios de redes sociales mostraban al menos cuatro cuerpos tirados en un callejón estrecho.
Ningún grupo se ha responsabilizado de los ataques.
Sin embargo, los atentados llevaban la firma de la red militar del Estado Islámico (EI) que suele reivindicar ataques contra los hazaras, que en su mayoría son musulmanes chiítas.
El Estado Islámico de la provincia de Khorasan (ISKP), un grupo armado afiliado al Estado Islámico, considera a la minoría chiíta apóstata por sus creencias religiosas.
Los hazaras en Afganistán han enfrentado décadas de abuso y discriminación.
Los hazaras viven juntos en vecindarios muy unidos, como la conocida zona occidental de Dashte Barchi en Kabul. Pero los convierte en objetivos fáciles para los ataques.
Un atentado con bomba cerca de una escuela secundaria para niñas mató a más de 100 en mayo de 2021.
Un ataque en octubre de 2020 a un centro educativo de la minoría religiosa mató a 24 e hirió a más de 50.
