¡Tarifazo! Autorizan aumento de $1.50 al transporte público concesionado en CDMX
El Gobierno de la Ciudad de México autorizó un incremento de $1.50 pesos a las tarifas del transporte público concesionado, tras una semana de tensión con organizaciones de transportistas que amenazaban con paralizar la capital si no se atendían sus demandas.
El acuerdo fue alcanzado durante una reunión entre autoridades de la Secretaría de Gobierno (SECGOB), la Secretaría de Administración y Finanzas (SAF), la Secretaría de Movilidad (SEMOVI) y representantes del sector, buscando equilibrar las condiciones laborales de los operadores sin afectar de forma grave el bolsillo de los usuarios.
Con el ajuste, las nuevas tarifas quedarán de la siguiente manera: microbuses y vagonetas cobrarán $7.50 pesos por recorridos de hasta 5 kilómetros, $8.50 pesos de 5 a 12 kilómetros y $9 pesos por más de 12 kilómetros; mientras que los autobuses de ruta cobrarán $8.50 pesos hasta los 12 kilómetros y $9 pesos si los superan. En tanto, los autobuses de corredor (morados) tendrán una tarifa de $9.50 pesos. Estas disposiciones serán publicadas próximamente en la Gaceta Oficial de la Ciudad de México.
El acuerdo incluyó una serie de compromisos de los concesionarios para mejorar la seguridad y calidad del servicio. Entre ellos, portar licencia tipo “C” vigente y visible, retirar vidrios polarizados, mantener seguro de responsabilidad civil y exhibir el número de placa en la cromática de cada unidad. Además, los operadores deberán realizar revisiones periódicas en luces, puertas, llantas, frenos y sistemas de seguridad como cámaras, botones de auxilio y GPS.
En materia de imagen y trato al usuario, los conductores tendrán que usar uniforme (pantalón oscuro y camisa blanca), mantener las unidades limpias y en buen estado, y participar en programas de capacitación.
Con esta medida, el gobierno capitalino logró evitar las manifestaciones que los transportistas venían anunciado para finales de octubre. Entre las demandas, se exigía homologar la tarifa con la del Estado de México, fijada en 14 pesos.
El incremento aprobado quedó lejos de esa cifra, pero fue suficiente para apaciguar el conflicto y garantizar la continuidad del servicio sin bloqueos en la capital.
