Uno de los electrodomésticos más básicos para el hogar es la lavasecadora. Este equipo es fundamental para mantener la ropa en buen estado y, sobre todo, ofrecer practicidad a quien la usa.
Lo que diferencia una lavasecadora de una lavadora convencional, es que la primera tiene doble función y la segunda no. Es decir, se puede lavar prendas y secarlas en el mismo aparato.
¿Cuál es la importancia de saber elegir una lavasecadora?
Entre la gran gama de electrodomésticos para el lavado que existen, hay opciones que ofrecen al usuario comodidad y la mejor tecnología para conservar la ropa más limpia.
Hoy existen tecnologías higienizantes que garantizan la eliminación de gérmenes, bacterias y alérgenos. Por esta razón es importante elegir una lavasecadora, ya que a la vez que deja la ropa impecable, aporta en el cuidado de la salud e higiene diaria.
¿Qué contemplar antes de adquirir una lavasecadora eléctrica?
En las tiendas se podrán ubicar diferentes modelos y marcas. Una lavasecadora de precio variado, ofrece al consumidor opciones de acuerdo a sus posibilidades. Las características que se deben conocer son:
- La canasta es la tina donde se introduce la ropa para lavarse. Por ello, el comprador requiere garantizar que esta posea una estructura que evite desgastar las prendas a causa de la fricción.
Hay lavasecadoras con tinas que cuentan con estructuras en forma de almohadillas, con lo que se obtiene un lavado delicado, pero eficaz en cualquiera de los ciclos.
- La autolimpieza de la propia lavasecadora también es imprescindible. Durante su uso normal, en los recipientes para detergente y suavizante, así como en la goma de la escotilla (la goma que sella la puerta) podría acumularse suciedad.
Para evitar lo anterior, hoy existen tecnologías higienizantes que aseguran condiciones de lavado óptimas. Estas, a través de mecanismos automáticos, se encargan de eliminar hasta 99.9% de bacterias y gérmenes.
- El tipo de motor, además de indicar la eficiencia del aparato, asegura que se reduzca la vibración y el ruido en los diferentes ciclos de lavado. A partir de 49 dB se puede considerar que el ruido será muy poco (cuantos más tenga más ruido hará).
- Hay lavasecadoras que cuentan con tecnología de microvapor para reducir las arrugas. Asimismo, tener un tambor amplio ayuda a que se extienda mejor la ropa.
Con ambas características, el usuario optimiza su tiempo después de lavar. Es decir, el planchado ya no será necesario, o bien será más fácil y rápido.
- Una lavasecadora de 12kg puede satisfacer las necesidades de un hogar promedio. Para elegir la capacidad se tiene que tener en cuenta el número de integrantes de la familia e incluso cuántas veces se lava a la semana. 60 prendas son aproximadamente 10 kilos.
- Un punto a tomar en cuenta consiste en cómo se va a meter la ropa. Esto se limita únicamente a tu preferencia, pues las dos opciones que hay en el mercado son la lavasecadora de carga frontal o de carga superior. La primera se ve más moderna y la segunda es el estilo tradicional o clásico.
- El buen funcionamiento y larga duración de una lavasecadora depende mucho de un uso correcto. Normalmente el usuario es quien se encarga de configurar el aparato para lavar en función de sus necesidades. Es decir, se indica el tipo de ciclo, nivel y temperatura de agua, principalmente.
En ocasiones. el usuario no dimensiona los aspectos anteriores y se hace una selección a “ojo de buen cubero”.
Por ello, hay electrodomésticos de lavado y secado que a través de sus balanzas internas ajustan automáticamente la cantidad de agua que se usa y la duración del ciclo. Esto ayuda a la optimización del consumo energético y un lavado impecable.
- Algunas de las lavasecadoras más modernas en el mercado incluyen luz interior. Este aspecto sirve para el momento de la carga y vaciado de ropa. El usuario podrá distribuir mejor la ropa al meterla y no olvidará nada al sacarla.
Como se puede notar, hay varios aspectos a considerar al comprar una lavasecadora. Si se conocen las necesidades y expectativas, ¡todo es más sencillo!
